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La cita de la World Travel Market, a partir de mañana en Londres, constituye un test de primer orden para la próxima temporada turística del 2015.

El departamento de Turismo del Consell insular, que dirige Salomé Cabrera, ha fijado un doble objetivo: convencer a las compañías de bajo coste para que opten por Menorca con la mejora de la conectividad aérea, lo que propiciará la llegada de un mayor número de visitantes que vienen directamente. Al mismo tiempo, se propone frenar la creciente dependencia que padece la Isla de los mayoristas tradicionales.

Los resultados de la temporada de este año evidencian la importancia que ha adquirido el turismo nacional para Menorca, tanto por el aumento del número de visitantes como el incremento del gasto. Los españoles han gastado 22,2 millones más, lo que supone un incremento del 9,2 por ciento frente a la caída del 7,2 por ciento en la reducción del gasto de los extranjeros, con una disminución de 46 millones.

La industria turística menorquina afronta el difícil reto de conseguir en un mismo espacio territorial la coexistencia de los visitantes con bajo poder adquisitivo con los de rentas altas.