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Siento profunda indignación y preocupación tras la alarmante información que ha salido a la luz respecto a los elevados niveles de nitratos en el agua de Mahón. Han pasado cerca de quince días desde que se hizo público este grave problema, y hasta la fecha, los ciudadanos seguimos sin recibir una respuesta adecuada por parte del Ayuntamiento ni del alcalde, cuya inacción es ya injustificable.

Es inconcebible que, sabiendo los riesgos que los nitratos suponen para la salud pública —especialmente para los niños, los ancianos y las personas enfermas—, el equipo de gobierno no haya tomado ninguna medida efectiva ni proporcionado la información necesaria a la población. En estos doce días de silencio e indiferencia, hemos visto cómo la salud de nuestros vecinos y familias ha sido completamente ignorada.

¿Cómo es posible que, ante un problema de esta magnitud, el alcalde no haya dado la cara? ¿Por qué no se ha informado de manera clara y transparente sobre la gravedad del asunto ni sobre las acciones que se van a emprender para solucionarlo? Esta falta de comunicación y de responsabilidad es un insulto para todos los que confiamos en las instituciones locales para protegernos.

Los ciudadanos de Mahón merecemos más que promesas vacías o explicaciones a medias. Merecemos un alcalde que actúe con rapidez y que anteponga la salud de sus ciudadanos a cualquier otro interés. No es aceptable que pasen dos semanas sin un plan de acción claro y sin información precisa. ¿Cuántos días más tenemos que esperar para que se tomen medidas reales? La salud de todos está en juego.

Exijo, como ciudadana preocupada y como parte de una comunidad que se siente abandonada, que el alcalde asuma su responsabilidad, informe de manera inmediata a la población y que se tomen las medidas necesarias para garantizar que el agua de Mahón esté libre de nitratos y otros contaminantes. Esta crisis no puede seguir siendo ignorada ni manejada con la apatía que hemos presenciado hasta ahora.

Espero que esta carta sirva para concienciar a todos sobre la gravedad de la situación y para que se tomen medidas inmediatas y eficaces. La salud de Mahón está en juego, y es responsabilidad de todos, especialmente de nuestras autoridades, protegerla.