TW

Como se lleva haciendo desde 1985, gracias a la Asamblea General de Naciones Unidas, el próximo 5 de diciembre se celebra el Día Mundial del Voluntariado, una jornada de reconocimiento a todas aquellas personas que por elección propia dedican parte de su tiempo a la acción solidaria de manera altruista.

Es por ello que, desde la Junta Local de Mahón de la Asociación Española Contra el Cáncer, queremos aprovechar para felicitar una vez más a esas personas excepcionales y generosas que regalan su valioso tiempo año tras año en pro del beneficio de sus semejantes, exaltando unos valores dignos de mención en esta complicada época en que vivimos. Aprovechamos también la ocasión para dar la bienvenida a todos los nuevos miembros a nuestra gran familia del voluntariado, quienes realizaron el Curso General de Voluntariado que organizamos el pasado 14 de noviembre en nuestra sede en Mahón.

Cuando nos encontramos en circunstancias difíciles, como lo es enfrentarse a una enfermedad como el cáncer en nuestro caso, es cuando nos mostramos como somos, con nuestras fragilidades y necesidades emocionales, porque todos precisamos de un hombro donde apoyarnos alguna vez en el camino que es la vida, y ahí es donde cobra fuerza la AECC encabezada por nuestro ejemplar equipo de personas voluntarias, que con su compromiso y participación, consideran a los otros, tienen en cuenta sus problemáticas y las necesidades que de ellas se derivan, y nos acompañan día tras día, no solo al lado del paciente oncológico y sus familiares, sino que participan y se implican activamente en nuestras campañas de prevención, obteniendo recursos económicos para que continuemos nuestra lucha contra el cáncer, ayudándonos de forma administrativa e incluso gestionando nuestra Asociación gracias a la aportación altruista del equipo de miembros dirigenets de la Junta Local de la AECC en Mahón, voluntarios todos ellos, encabezados y supervisados por su presidente, José Pons Pascuchi, proque solo una hábil dirección puede posibilitar que la AECC siga siendo un proyecto sostenible que mejore la vida de tantas personas con la colaboración desinteresada de tantas otras. Gracias a ti Voluntario, por serlo, por sentirlo y por encontrar gratitud en el dar.

En nuestro caso, la labor desinteresada de nuestras personas voluntarias hace posible el desarrollo y el mantenimiento de los proyectos y servicios que ofrecemos en la AECC. Son uno de nuestros pilares fundamentales.

Ser voluntario significa compromiso, participación, considerar a las personas que nos rodean, y tener en cuenta sus problemáticas y las necesidades que de ellas se derivan, e interactuar para tratar de reducir o eliminar sus carencias.

Significa también perseverancia, caridad, entrega, heroísmo, amor al prójimo... Pero significa, sobre todo, responsabilidad social, calidad humana y generosidad, y aunque sus motivaciones son distintas, su objetivo es común: dar lo mejor de sí mismos sin esperar nada a cambio.