Cartas de los lectores

El passat 20 de novembre la gran majoria de ciutadans d'aquest país va confiar amb el canvi polític. Menorca també va voler el canvi polític i en especial la gent de Ciutadella, que va xerrar a les urnes, ja que va ser la població de Menorca que va concentrar el major nombre de vots al Congrés i al Senat a favor del Partit Popular. És una realitat aquest fet que no podem amagar, evidentment que la gent de Ciutadella sabia que anava a votar pel canvi al Govern central però la veritat és que molta gent ha valorat la feina que ha anat fent José María de Sintas Zaforteza, l'equip de Govern i la Junta Local al llarg d'aquests darrers mesos, ja què l'alcalde i l'equip de Govern fan feina amb bona fe, humilitat, coherència, honradesa i molt de respecte a la gent de Ciutadella. Esper que aquests resultats obtinguts aquest passat dia 20 tenguin un pes important i tant la Senadora senyora Juana Francis Pons Vila com el Diputat senyor Joan Carles Grau ho tenguin en compte. Desgraciadament trobaran pocs euros o segurament molts deutes al Govern central, però segur que lluitaran pel bé d'aquí i de Menorca. Finalment, dir que tots els ciutadellencs i ciutadellenques hem d'anar units i així aconseguirem coses bones per al poble de Ciutadella i amb benefici de tots per poder viure millor dia a dia.

Diego Pons Pons
Ciutadella

Adiós, Menorca

Como persona ajena a la política pero que, por su experiencia profesional, se le ofreció la Direcció Insular d'Atenció a la Dona, Infància, Joventut i Immigració, no puedo menos que agradecer a la vida la oportunidad de haber dedicado al menos un breve mes a una tarea que se presentaba llena de atractivo, creativa y constructiva y que, como profesional, como persona, deseaba hacer desde la discreción, primando la eficacia y, todo sea dicho, con unas condiciones económicas prácticamente iguales a las del trabajo que abandoné.

Ha sido una experiencia breve pero intensa, suficiente para poder expresar, con conocimiento de causa, mi genuina satisfacción por haber conocido a personas, como los técnicos de esa DI, de gran calidad humana y preparación profesional. Siempre he considerado que el trabajo de los técnicos es clave para el buen funcionamiento de toda organización y, aunque no siempre reciben todo el reconocimiento que merecen, hay que aceptar que son ellos los que suelen tener las experiencias de primera mano, los que están diariamente en contacto directo con los problemas reales que hay que solucionar y por tanto su opinión suele ser buscada, apreciada y respetada por los jefes que valoran el trabajo en equipo. Quienes a lo largo de su vida hayan tenido la experiencia de haber trabajado como técnicos y también como directivos, sabrán bien de lo que hablo.

Por otra parte, como persona con experiencia en la coordinación y dirección de equipos de atención psicosocial y en el desarrollo de investigaciones en centros universitarios, percibí que las características sociodemográficas de Menorca eran ideales para el desarrollo, o el perfeccionamiento, de programas sociales modélicos. Y en los técnicos noté sus ganas de hacer bien las cosas, sentido común y receptividad al estímulo y a la motivación.

En las actuales circunstancias económicas, el control del gasto es esencial. Pude intuir, sin embargo, que los recortes (el remedio que se nos recordaba prácticamentea diario como método para luchar contra la crisis) constituyen solo una vía para alcanzar el control del gasto. Los recortes, por sí mismos, son una solución parcial e incompleta (y por tanto frustrante) si quienes están en los cargos directivos no los acompañan con una metodología de trabajo que promueva la ejecución ordenada, eficiente y responsable de la actividad laboral, que priorice los objetivos por su necesidad antes que por su espectacularidad y por su calidad antes que por su cantidad. No sería eficiente, ni acorde con el sentido común en tiempos de crisis, el modificar programas que funcionasen bien o cambiar las personas que los llevan a cabo, si se hiciera solo como consecuencia de un cambio en el partido gobernante.

Deseo muy sinceramente que el personal técnico que conocí, bien dirigido, estimulado y respetado, encuentre la satisfacción profesional y la plenitud personal que merecen, trabajando en equipo, continuando o mejorando programas ya existentes y, si las circunstancias lo permiten, implementando nuevos programas.

Aprovecho estas fechas tan señaladas para desear éxito y felicidad a todas las personas con las que pude compartir el interés por un trabajo discreto, eficaz y profesional.

Felices fiestas y feliz 2012.

Cordialmente,

Dra. Mª Luisa de Cáceres Zurita
exdirectora insular de Atenció a la
Dona, Infància, Joventut i Immigració