Cartas de los lectores

Recientemente leemos en la prensa titulares bastante inquietantes sobre la situación precaria de los centros públicos. Si el lector no tiene mucha información sobre el tema, podría pensarse, en un primer momento, que esta precariedad económica se debe a una mala gestión interna de los centros públicos, a un despilfarro de recursos... ya se sabe que los centros laicos no hacen las cosas como Dios manda. Sin embargo, este problema económico tiene como causa directa la política de la mal llamada "austeridad" en la dotación presupuestaria a los centros públicos, realizada por la Conselleria d'Educació. La situación que se plantea es tan alarmante que, por ejemplo, ya no hablamos en sentido figurado de "congelación" del sueldo de los profesores, sino que hablamos de congelación en sentido literal: si se ponen las cosas feas, vamos a morirnos de frío este invierno, porque no sabremos si tendremos ni siquiera dinero para calefacción , aparte de otros muchos recursos indispensables. Quizá, esta actitud comedida, de gran estoicismo y austeridad, no sea sino una forma de entrenamiento, de preparar a los futuros 400 profesores en paro, para el gélido clima de Alemania.

Nuevamente parece repetirse el argumento de las películas españolas de los años 60: " Vente para Alemania, Pepe", porque aquí el trabajo para muchos docentes no está asegurado. Será cuestión de probar fortuna en las frías tierras del norte de Europa.Resulta plenamente desconcertante y de humor negro, recordar ahora las afirmaciones electorales del Sr. Bauzá, señalando que esta legislatura sería la "legislatura de la educación, la "autopista hacia la educación" o algo semejante. Efectivamente estas afirmaciones tienen parte de verdad: esta legislatura será para 400 o más profesores públicos la autopista hacia el paro y la precariedad laboral. Por otro lado, la gestión de los centros públicos no funciona con la rapidez y agilidad de las vías de alta velocidad, sino de los abruptos caminos de cabras y piedras, porque se nos presenta un camino lleno de baches y obstáculos, poco fluido, y ante el futuro que nos espera, más de uno perderá la cabeza, como las cabras del monte.Si el futuro de muchos docentes no está asegurado, nosotros nos preguntamos cómo podemos los profesores animar a los alumnos de nuestros institutos públicos para que estudien una carrera universitaria, si ellos se dan cuenta que muchos de los que este año son sus profesores, estarán en las listas del paro el próximo curso. Eso no es precisamente predicar con el ejemplo.Ante este panorama parece que la actitud socialmente aceptable y políticamente correcta es adoptar un aséptico y cómodo estoicismo o ampararnos en la mansedumbre de una resignación religiosa, no sea que los profesores, en una especie de locura juvenil, perdamos la cabeza y nos pongamos a hacer huelga un día tras otro, como nuestros colegas de la comunidad de Madrid, rompiendo "el orden y la armonía" en las aulas y, sobre todo, lo más peligroso: "haciendo el vago", que ya se sabe que la cabra tira al monte y que su hábitat no es lo que el Sr. Bauzá, al referirse a la educación, llama autopistas.

Departamento de Filosofía del IES Berenguer d'Anoia de Inca: Marc Mercadé, Xavier Riera,
Pere Guillem Verd, Eva Navarro

Arriba Nadal!

Estem a les portes de un nou Nadal i em dóna la impressió que a Ciutadella hi ha poca alegria. He anat a una tenda de joguets i jo no he vist cara de il·lusió en la gent que se emportava els regals de Nadal o Reis per als seus fillets. Per els carres hi ha foscor. En les fotos de els diaris , surten moltes cares llargues (tret de els polítics que sempre apareixen somrients). Pareix que la tan cantada crisis ens ha fet un buit en els nostres cors i ha deixat pas a la tristor.Poc després he anat a veure una monja amiga i dins aquelles parets fredes del convent, he vist la il·lusió i la alegria que tan necessitava veure. La seva vida no entén de crisis, ella juntament amb les seves germanes, estan recreant el naixement del Déu fet infant, cada any, a un lloc diferent del nostre planeta, elles cerquen, pensen, estudien a on seria bo que aquest any nasqués el Salvador i fan un magnífic betlem, el qual a més de fer les delícies dels més petits, intenta enviar un missatge d'esperança als més grans.

Ella em parla de la seva visió de el gran amor que Déu ens té, que ens estima fins fer-se un indefens fillet acabat de néixer que ens ha de mester a noltros per poder sobreviure: l'han d'abrigar, l'han d'alimentar, li han de fer tot... i amb aquest betlem intenten transmetre'ns la seva fe, o com diu ella, aportar el seu granet d'arena per expandir la glòria del Senyor, per mostrar-nos la seva bondat, i és en aquestes petites coses que troben la felicitat, la il·lusió de fer el bé, de fer un món millor.Quan he arribat a ca meva, he sentit la necessitat de dir a tots els que vulguin escoltar, que dins un convent fred, amb una vida austera, sense massa comoditats, hi ha unes persones que viuen amb intensitat tota l'alegria i tota la felicitat de rebre el Nadal que ja s'atraca i ens desitgen a tots molta ventura.

Margarita Bosch Mesquida
Ciutadella