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Uno de los temas prioritarios para una conducción segura por carretera, es el mantener en perfecto estado de pintura las señalizaciones horizontales; la Dirección General de Tráfico informa con todo detalle las diferentes líneas, o sea, la continua, discontinua, discontinua doble, continuas adosadas a discontinuas, etcétera, que los conductores tenemos la obligación de respetar cuando conducimos cualquier tipo de vehículo, pero como no estamos en el País de la Maravillas, donde Alicia soñaba que vivía, diariamente compartimos las carreteras con algún camicace, que no tiene en cuenta que la más larga en nuestra Isla, solamente tiene 45 kilómetros de distancia, entre Ciutadella y Mahón, que por muchas imprudencias que haga para llegar más rápido, solamente ahorrará unos minutos y por el contrario pondrá en peligro a más de uno, incluido él, si provoca un accidente.

El pasado sábado me desplacé a la ciudad del poniente menorquín, para asistir a la designación y posterior entrega, de los Fabiols de Plata y de Bronce de los Ciutadellencs de s´Any 2016, concurso organizado por el Centro Cultural Casino 17 de Gener que lleva 44 ediciones. Aprovecho la ocasión para felicitar a los organizadores y premiados, que a pesar de tener una noche de perros, en cuanto a climatología, fue un verdadero éxito.

De regreso a Mahón, con una intensa lluvia y viento del carajo, las pasé canutas para conducir, una gran parte de la carretera general la pintura de las líneas horizontales brillaba por su ausencia, vatuadell cent llamps, que no se veía un carajo. Señores responsables de movilidad del Consell Insular, recomiendo desembolsar el billetaje necesario y a pintar tocan, que los usuarios de la general lo agradecerán. Personalmente prefiero más conducir por la noche que de día, si la señalización es óptima.

H., un extranjero con residencia en Menorca desde hace varios años, me comentó que a principios del pasado año 2016, había recomendado por escrito a la Autoridad Portuaria de Baleares, la instalación de un punto de recarga para coches eléctricos en la zona del Club Marítimo, del puerto de Mahón, donde él tiene su vivienda. Su petición no tuvo respuesta alguna.

En el transcurso del pasado mes de Noviembre, recibí un correo electrónico de H., en el me adjuntaba unas fotos de la instalación de un punto de recarga para coches eléctricos, en la zona del Paseo Marítimo, a poca distancia del ascensor que une dicho paseo con la zona del Club Marítimo, su comentario era de alegría, ya que de esta forma se cumplía su deseo. Me llama este jueves, para comentarme enfadado, que el artilugio (equipo de carga para coches eléctricos) después de dos meses de anunciar los de Dalt la Sala su instalación, aún no ha entrado en servicio. Su gozo en un pozo.

Me doy un garbeo para comprobarlo, efectivamente no lo han puesto en servicio, ni el contador eléctrico está instalado. Amigo H. en este país las cosas de palacio van despacio, seguramente están pendientes de la licencia municipal. Si vivim coses veurem.