Ciutadella acoge un taller sobre el anillamiento científico de aves | Gemma Andreu

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El programa «Els ocells del teu poble» lleva ya cuatro años en marcha en el municipio de Maó. Iniciativa que este sábado aterrizó en Ciutadella, también con muy buenos resultados. Prueba de ello fue la respuesta de las personas que mostraron interés por saber algo más de unos vecinos que nos rodean, los pájaros urbanos. Aunque con plazas limitadas por razones de seguridad, la convocatoria fue un éxito con la participación de 45 personas divididas en tres grupos.

El encuentro tuvo lugar en la zona verde del Canal Salat próxima al colegio de Monte Toro y su principal objetivo no fue otro que dar a conocer la biodiversidad de Ciutadella y de paso mostrar cómo se lleva a cabo el proceso de anillamiento, una herramienta que los expertos utilizan para el análisis y estudio del comportamiento de las aves.

«Se trata de unos animales que comparten el medio con nosotros; sabemos que a veces pueden generar molestias, pero todo tiene solución. Nuestra intención es hacer que la población vea a los pájaros más como un beneficio que como un problema», explica el ornitólogo Javier Méndez, miembro de la Societat Ornitològica de Menorca, organizadora del encuentro con la colaboración de Ecoembes a través del proyecto Reciclos y el Ayuntamiento de Ciutadella. Entre los beneficios de los que hablan los expertos ocupa un lugar importante la gran cantidad de insectos que comen para el alivio de los humanos.

Con la ayuda de unas redes japonesas se capturaron ayer cerca de 40 pájaros para ser anillados científicamente. Principalmente ejemplares de colirrojo tizón, gorrión y mirlo común, los más habituales en esta época del año. Su anillamiento, explica Méndez, permite hacer un seguimiento sobre qué parte de la población sobrevive, si regresan cada año a la Isla o si sufren algún tipo de enfermedad.

Está claro que los pájaros también habitan en los pueblos y ciudades. Y en ese sentido en Menorca jugamos con cierta ventaja, al tener la naturaleza tan cerca de nuestro entorno. Complicado, por no decir imposible, resultaría poder divisar en el cielo de Madrid o Barcelona un águila calzada, algo que en cambio sí sucede en las poblaciones menorquinas.

El programa aún tiene tres citas pendientes en Ciutadella: en Es Pinaret (los días 9 de enero y 27 de febrero) y de nuevo en el Canal Salat (30 de enero).