TW
1

La tempestad marina que en la costa del norte de la Isla produjo olas de hasta once metros ha traído al puerto de Maó un hermoso velero checo que debía ser reparado por los daños que le causó el oleaje.

El «La Grace» es un velero escuela checo botado en diciembre de 2010 que se construyó como replica de un bergantín de la segunda mitad del siglo XVIII.

El propietario del barco original fue Augustin Herman, el primer marinero checo, quien con el «La Grace» atravesó el Atlántico varias veces al servicio de la Compañía Holandesa de Indias Occidentales. Después se independizó y empezó su carrera de corsario. Se hizo conocido asaltando con su velero dos naves comerciales españolas que transportaban azúcar, tabaco y vino junto a las costas de Guatemala. Más tarde, se convirtió en el exportador más grande de tabaco desde América.

Navegación

El moderno «La Grace» se dedica hoy a actividades muchos más pacíficas que las de su antecesor. Es un buque escuela utilizado para enseñar el arte de la navegación a vela, aunque también ofrece a los pasajeros cruceros de relax.

El bergantín tiene como bases mediterráneas para sus sálidas de navegación los puertos de Palma, Salerno (Italia), Kelibia (Túnez), Cagliari (Cerdeña), Séte y Toulon (Francia), aunque su base principal es el puerto italiano de Porto Baratti, en la Toscana. El precio de diez días de navegación para un adulto se sitúa en torno a los 900 euros.

Este jueves la tripulación del «La Grace», en su mayor parte checa, reparaba los daños causados por el temporal, principalmente en su proa. Su capitán, Jiri Novak, esperaba poder zarpar este viernes.

Con su nombre, el velero no pudo llegar a mejor puerto ya que la patrona de la ciudad tiene una bien ganada fama de protectora de los marineros.