El juicio se celebró hace una semana en el Juzgado Penal de Maó.

TW
4

Un acuerdo entre la acusación, el fiscal y la defensa ha permitido al magistrado-juez del Juzgado Penal de Maó dictar una sentencia de conformidad por la que condena a un hombre como autor de un delito de agresión sexual cometido sobre una joven en un disco-bar de la zona de poniente del puerto de Maó hace un año.

El hombre, de unos 35 años de edad, aceptó los hechos por los que ha sido juzgado este mes y le han supuesto una condena de un año de prisión, además de una prohibición durante dos años más, de aproximarse y comunicarse con su víctima a no menos de 100 metros de distancia. La acusación particular a cargo de la agredida se adhirió a las mismas peticiones recogidas por el Ministerio Público en su escrito de acusación.

En el orden civil, además, deberá indemnizar a la mujer con 600 euros por los daños morales ocasionados. El fiscal y el juez no se opusieron a la suspensión de la ejecución del castigo por lo que el condenado evita su ingreso en la cárcel siempre que no vuelva a delinquir, al menos, en el plazo de los dos próximos años.

La madrugada en la que se produjo la agresión sexual fue la del 17 de noviembre del año pasado. El hombre entró en los baños a los que había accedido la joven, que carecen de pestillo en ese establecimiento y allí se encontró con la mujer sentada en el inodoro. Sin que mediara palabra entre ellos, él comenzó a tocarle los pechos por encima de la ropa y a besarla en contra de su volundad.

Estrés postraumático

La chica sufre un trastorno por estrés postraumático de grado moderado como consecuencia del delito sexual del que fue objeto aquella noche, admitido por el acusado en el juicio al aceptar la condena.

El hombre fue detenido un mes después de que cometiera los hechos por los que ha sido juzgado y permaneció dos días privado de libertad en los calabozos de la Policía Nacional de Maó. La sentencia fue declarada firme en el mismo juicio oral