El Camí de Cavalls, un punto negro para los bomberos: suben un 30 % los rescates

En 2021 esta tipología de actuaciones alcanzó el 35 por ciento  del global que prestaron los efectivos, en un año en el que los incendios propiamente dichos fueron de muy escasa relevancia, pero en el que aumentaron los siniestros en domicilios. La dificultad de los accesos para la llegada de los vehículos y, especialmente, la falta de cobertura para la telefonía móvil en muchos puntos del Camí de Cavalls son handicaps con los que combaten a diario los bomberos ante las llamadas que reciben por accidentes o extravíos en el camino semiperimetral de la Isla, cada vez más frecuentado.

Fueron un total de 244 intervenciones de rescate    en 2021 frente a las 170 del año anterior, lo que representa un incremento del 30 por ciento en un solo ejercicio. La mayoría de ellas tuvieron lugar en el Camí de Cavalls, especialmente en la zona de poniente, a decir del jefe de bomberos, Joan Rosselló, porque se recorre más al ser de un trazado más asequible que la del levante insular. Fueron 130 atendidas por el parque de Ciutadella y 101 en el de Maó. El resto corresponden a Es Mercadal y Ferreries.

La memoria del año anterior presentada este jueves por la consellera de Cooperación Local, Cristina Gómez, el jefe del servicio, Joan Rosselló y la directora insular, Natividad Benejam, refleja un incremento de 53 intervenciones totales respecto a 2020, especialmente localizadas en los rescates.

Tanto Rosselló como el jefe de Maó, Juanjo Franch, destacaron las actuaciones en domicilios por accidentes domésticos de personas de edad avanzada que viven solas, y también la apertura de puertas. «Ha habido menos actuaciones en exterior y más en interior», señaló el responsable insular.

La riada de Ferreries y el incendio de la cubierta del polideportivo de Es Mercadal fueron los siniestros que precisaron el mayor despliegue operativo del año.