El mal estado de la acera de Ses Moreres ya ha causado varios accidentes | Javier Coll

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Habrá que caminar mirando al suelo, especialmente si es a plena luz de sol, para evitar accidentes por el mal estado de las aceras en algunas calles de Maó. Así se desprende de la sentencia absolutoria que dictó hace dos semanas la juez del juzgado Contencioso Administrativo de Palma. El fallo admite que había baldosas hundidas junto al bordillo, que fueron las que provocaron la caída de una mujer en la Cuesta de Corea fracturándose el brazo y la pierna, por la que solicitaba una indemnización de 18.000 euros al Ayuntamiento de Maó. La magistrada entiende, que al producirse el percance a plena luz del día, pese al estado de las baldosas, la mujer accidentada debía haberlas visto y evitarlas. Sorprendente.

Otra reclamación en ses moreres. Nuevo caso similar al anterior que se plantea al Ayuntamiento de Maó. Una mujer de 64 años sufrió rotura de tibia y peroné después de caerse en la acera de la calle de Ses Moreres en agosto de 2013. El marido reclamó al consistorio, tras conocer otra sentencia que había condenado a abonar 20.000 euros a una señora por otra caída prácticamente en el mismo lugar, en una demanda ganada por el abogado Miquel Quetglas. «Fui con la noticia al ayuntamiento para evitar un contencioso, me dijeron que sí se harían cargo de la reclamación, pero ahora parece que se echan atrás», explica el marido, decidido a acudir al juzgado.

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Colisión en Maó. Sobre las 17 horas del pasado sábado se produjo una colisión frontolateral en la entrada de Maó, en un lugar próximo al edificio de Quesería Menorquina. Chocaron un Peugeot 206 y una furgoneta Wolksvagen. No hubo heridos.

Recuperar a sus hijos. Casi un millar de firmas (927) se habían registrado en la tarde del domingo en la plataforma Change.org, en apoyo a una madre de Es Castell, desesperada para recuperar a sus dos hijos, actualmente a cargo del departamento de menores del Consell Insular, desde hace un año, en la Casa de la Infancia. El entorno de la mujer ha promovido esta campaña para detener el proceso encaminado a que los niños pasen a una casa de acogida, previo paso a la adopción.

Pide la suspensión cautelar. Su abogado ha puesto una demanda en el juzgado contra el Consell insular para pedir la suspensión del proceso y, como medida cautelar, que los niños regresen con su madre hasta que se resuelva. Ella asegura haber seguido todas las indicaciones de la Conselleria desde que le fueron retirados sus hijos para recuperarlos por el ambiente violento que se vivía en su domicilio debido a las peleas con su pareja, que ya no vive con ella. La madre ya tiene prohibido visitar a sus hijos desde el pasado jueves -lo hacía dos horas a la semana- para no entorpecer el proceso de acogida.