TW
0

J.C.


Una de las palabras que el español ha aportado a buen número de lenguas europeas es "guerrillero". Fue tan llamativo y valiente el comportamiento de aquellos hombres (aunque alguna mujer hubo) que se enfrentaron contra el poderosísimo ejército de Napoleón con las manos peladas (con un trabuco o un cuchillo, en el mejor de los casos) que su gesta ha pasado a la historia y, con ella, el término con que se les designaba. También actuaron en otras muchas guerras de las que han asolado esta tierra, pero fue en la llamada de la Independencia donde su actuación fue gloriosa y la fama, perdurable.

Esta presencia ha sido estudiada por Rafael Abella y Javier Nart en su ensayo "Guerrilleros", donde brilla ese pueblo en armas que se rebeló contra la presencia indeseada de las tropas francesas entre 1808 y 1814. No se han limitado a estudiar a los más conocidos entre ellos, como El Empecinado, Espoz y Mina, el cura Merino, Juan Díaz Porlier o Gaspar de Jáuregui, sino que bucean en las huellas que dejaron un gran número de personajes que no quisieron permanecer inactivos ante lo que consideraban un atropello. Siguen sus pasos, atienden a las acciones que emprendieron por esos montes y caminos, examinan la efectividad de sus iniciativas y llegan hasta el final al que se vieron abocados, que si bien en algún caso fue glorioso, al ser reconocidos sus méritos con grados en la milicia, en otros les condujo al olvido y a la marginalización. Y a su rencor al verse tan mal pagados.

Hace pocas semanas comentábamos en esta página la publicación de un ensayo del profesor García Cárcel sobre los mitos de la guerra de la Independencia ("El sueño de una nación indomable"). No es arriesgado pensar que en los próximos meses tendremos noticia de más estudios, exposiciones y actos conmemorativos, porque se cumplirá el segundo centenario de aquellos hechos. No se trata a estas alturas de reivindicar nada, ni de presentarlos como la manifestación de un pueblo que no se deja atar a ningún yugo, sino simplemente de recordar el pasado y conocer lo que hubo a su alrededor, que nunca es bueno o malo en su integridad, sino complejo y fruto de mil avatares.


Guerrilleros

Rafael Abella y Javier Nart

Historia. Temas de Hoy. Madrid, 2007.

352 páginas. 22 euros.