Casas en la urbanización de Cala Sant Esteve, en Es Castell. | Archivo

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El pleno de Es Castell aprobó de manera definitiva el proyecto de dotación de alcantarillado de Cala Sant Esteve, descartando las alegaciones que había presentado el GOB.

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El grupo ecologista señaló que la infraestructura podría cambiar la fisonomía de la cala y alertó sobre la coincidencia entre la tramitación del proyecto y la compra de 53.000 metros cuadrados de terreno protegido en los alrededores del Fort Marlborough por parte del Grupo Grifols.

En este sentido, el GOB recordó que ahora se abre la puerta a poder construir en las parcelas que están paralizadas por la falta de saneamiento. También denunciaron el impacto paisajístico y pidieron cambiar la ubicación de la estación que recibe las aguas residuales.