Vista general de la entrada al Llatzeret, en el puerto de Maó. | ARCHIVO

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Al Consell se le ha puesto muy de cara la adquisición de los terrenos del islote del Llatzeret del puerto de Maó que están en manos privadas. Las deudas que acumula la propiedad de este espacio natural de algo más de siete hectáreas han precipitado la apertura de una venta pública con una valoración de subasta de la finca de 67.335,6 euros, según la información publicada ayer por el BOE, en la que se recuerda que la máxima institución insular tiene reservado el derecho de retracto, es decir, una posición de preferencia en la adquisición que le permite quedarse con los bienes por el mismo precio y en las mismas condiciones en que se cierre un acuerdo.

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Cabe recordar que la institución insular cuenta con una ayuda concedida de 5,5 millones de fondos europeos para tres adquisiciones: la antigua sede de Correos en Maó, cuya compra ya ha cerrado por 1,1 millones, el aeroclub, que se quedará por algo menos de tres millones, y la parte privada del Llatzeret, para la que le quedarían alrededor de 1,5 millones. Ahora se le ofrece la oportunidad de quedarse los terrenos para su conservación por mucho menos. Resulta complicado pensar que se vayan a producir muchas pujas al alza en el proceso que arranca ya y que se cerrará el próximo 30 de diciembre.

La opción preferente del Consell, que puede participar en la subasta, resulta disuasiva para otros interesados en un suelo en el que además no se pueden hacer grandes intervenciones por su carácter protegido. De hecho, la empresa, Explotaciones Menorquinas Comerciales SL, titular desde los años 90, trató sin éxito llevar a cabo un proyecto que incluía obras de gran reforma, con la implantación de un nuevo uso residencial sobre la edificación existente en la finca, de 50 metros cuadrados en planta baja. La licencia fue denegada por el Ayuntamiento de Maó en septiembre de 2022.