El Consell inicia esta campaña para sensibilizar a visitantes y locales sobre la importancia de la posidonia en las playas.

TW
0

El Consell insular ha iniciado una campaña de sensibilización para concienciar a la población sobre la importancia de la posidonia en las playas de Menorca. La iniciativa contempla la instalación de una mesa informativa itinerante en diferentes playas de la Isla para que visitantes y residentes puedan conocer la ecología de las playas de Menorca y los beneficios de la presencia de la posidonia.

Esta campaña pretende precisamente informar y sensibilizar a los usuarios poniendo especial énfasis en explicar la función que cumplen los restos de posidonia en la orilla de las playas de la Isla. «Queremos fomentar la normalización y aceptación de su presencia en las playas», afirma el conseller de Medio Ambiente, Reserva de Biosfera y Cooperación, Simón Gornés, que añade que «queremos que los usuarios de las playas se conviertan en aliados y colaboradores activos de la protección y defensa de esta planta marina».

Para ello, un equipo de educadores ambientales explicará a los usuarios cómo funciona el sistema natural de una playa y cómo son los restos de posidonia en una mesa informativa itinerante que se instalará cada día en diferentes playas de Menorca durante siete horas diarias en los meses de más afluencia, julio y agosto.

Uno de los recursos didácticos que ha preparado el Consell.
Noticias relacionadas

Además, se repartirán trípticos informativos y se pondrá a disposición de los usuarios libros de consulta y otros recursos didácticos. Asimismo, los educadores ambientales también organizarán actividades dirigidas principalmente al público infantil y juvenil dos veces al día.

Esta campaña, indican desde el Consell, se complementará con una serie de audiovisuales sobre la posidonia en diferentes idiomas que se difundirán a través de varios canales para llegar tanto a visitantes como a la población local.

Desde la institución insular recuerdan que los restos de posidonia no se retiran de las playas naturales y que, en las urbanas, si es necesario se retiran con métodos mecánicos a partir de mayo. Se acumulan en zonas adecuadas de la misma playa y en otoño se vuelven a colocar en la orilla para recuperar la arena y proteger la playa.