El acto de reconocimiento, en el Auditori de Ferreries. | Gemma Andreu

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Creu Roja aterrizó en Ferreries en el año 1974 a través de su asamblea local. Hasta entonces, la actividad en la localidad dependía de la oficina radicada en Ciutadella, donde se empezaron a formar a los voluntarios que pasarían a formar parte de la primera sede de Ferreries.

En recuerdo del nacimiento de la entidad humanitaria en el municipio y en reconocimiento de la labor efectuada por los primeros voluntarios y la que continúan ejerciendo los 79 afiliados en la actualidad, el Auditori de Ferreries acogió anoche un homenaje a una institución que también cumple 150 años de presencia activa en Balears.

Inicios

Pese a contar en un primer momento con «una oficina muy precaria», el presidente de Creu Roja, Eustaquio Martínez, explica que al principio las funciones de la entidad en Ferreries se limitaban a realizar guardias a través de Ciutadella, a atender a las posibles llamadas de socorro y a intervenir en la ayuda a heridos en accidentes, además de colaborar en el servicio de socorrismo de la playa de Cala Galdana.

«Poco a poco ha ido evolucionando hasta lo que es hoy», afirma el máximo mandatario. Hoy en día, el campo de actuación de Creu Roja Ferreries se ha ampliado considerablemente, ejerciendo una importante labor social en la población. «Repartimos la comida del geriátrico del pueblo para unas 25 personas, ayudamos también en el centro de día para el traslado de los ancianos que no pueden hacerlo por su propia cuenta...», explica Eustaquio sobre la atención a los más mayores.

Aparte de todo ello, Creu Roja asume un papel esencial en las fiestas patronales. En Sant Bartomeu, sus voluntarios están presentes para ofrecer un servicio de socorro y emergencias. Además, la presencia en Cala Galdana sigue siendo efectiva gracias a la colaboración con la delegación de Creu Roja en el mar y a la participación de determinados voluntarios, los cuales también se encargan de las labores de logística.

Fotos: Gemma Andreu

Futuro

El objetivo a partir de ahora, según apunta el propio Eustaquio, es «seguir colaborando con los servicios sociales y los Ayuntamientos», además de los «servicios de emergencia preventivos y generales».

Pero su radio de actuación no se limita únicamente al término municipal de Ferreries, sino que también se encargan de efectuar las mismas labores en Es Migjorn Gran, donde esperan contar próximamente con una nueva oficina, algo en lo que el Ayuntamiento ya está trabajando para tener lo antes posible.