Ashome lamenta que el aumento de plazas no ha ido acompañado de una mejora en la inversión de las infraestructuras. En la imagen, la urbanización de Arenal d’en Castell. | ARCHIVO

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Sigue el rifirrafe entre la Asociación Hotelera de Menorca (Ashome) y Més per Menorca a cuento de la masificación turística. El melón lo abrió primero el presidente de los hoteleros, Sebastià Triay Fayas negando, entre pullas a Més, que exista una saturación, más allá de 40 días al año. La formación ecosoberanista le reprochó que «cierre los ojos ante la evidencia» y que el sector turístico será uno de los damnificados cuando «Menorca muera de éxito»

Ahora la patronal hotelera ha replicado a Més, para recordarlo que «fue bajo su mandato» cuando se registró «un aumento exponencial de plazas legales, gracias a la ley turística de Biel Barceló de Més per Mallorca, y a la que Més per Menorca votó a favor».

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Un incremento de plazas, prosigue Ashome, que «no ha ido acompañada de una inversión significativa en la mejora de nuestras carreteras e infraestructuras», por parte de las instituciones, algunas de las cuales Més estaba gobernando.

«La turismofobia no solo promueve la exclusión y el resentimiento, sino que también perjudica económicamente a las comunidades locales que dependen del turismo para su sustento», esgrime Ashome, que apuesta que en vez de «rechazar a los turistas, trabajar juntos para encontrar soluciones que aborden los problemas subyacentes, como la congestión, el aumento de los precios de la vivienda y la preservación cultural». Con todo, invita a Més per Menorca y a su coordinador Josep Juaneda a «unirse al consenso en pro de la industria turística», ya que «negar la importancia y los beneficios que aporta a Menorca es ignorar la realidad y el potencial de crecimiento que representa para el bienestar de los menorquines».