Ayer, primer domingo de julio, se confirmó esa tendencia en una temporada que sigue estando marcada por la incertidumbre. Alas 9.25 de la mañana, las señales luminosas informativas en la Ronda Sur ya avisaban de que el aparcamiento de Cala en Turqueta estaba lleno. Una hora más tarde cerraba el de Son Saura. Según explicaba un informador en el acceso a esta última playa, durante la semana los turistas incluso madrugan algo más todavía. El sur se lleva la fama, pero tampoco nos podemos olvidar del norte, donde el pasado sábado también se llegaron a completar las 400 plazas de La Vall.
Los turistas empiezan a tener claro que en el caso de las calas vírgenes de Ciutadella uno no va a la playa cuando quiere, sino cuando puede. A las 9.45 de ayer, una pareja de visitantes madrileños relataba cómo tras no haber conseguido billetes de autobús para ir a Macarella el sábado, ayer no tuvieron más remedio que reservar plaza a primera hora y madrugar. El conductor de uno de los servicios de la tarde reconocía que «la ocupación está siendo alta», razón por la cual está previsto que hoy comiencen a reforzarse el servicio con más plazas.
En el punto de control de Sant Joan de Missa, una informadora relata que los días de más actividad son de lunes a jueves y que por el momento no está habiendo atascos. Sin embargo, el tráfico fue denso durante toda la mañana de ayer, y eso que los luminosos ya anunciaban que los accesos estaban cerrados. Ello obedece a que, a pesar de la advertencia, son muchos los que intentan probar suerte, pero finalmente se ven obligados a dar marcha atrás.
Desde la empresa que se encarga de las labores de control e información, una de sus coordinadoras, Eugènia Moll, reconoce que hasta ahora la temporada está transcurriendo «con completa normalidad y sin incidencias». Apreciación compartida por la mayor parte de los informadores preguntados al respecto, aunque alguno señala que la «gente siempre suele estar un poco más agresiva por la tarde» cuando no pueden entrar.
Una cala de anuncio
Las de sur figuran entre las playas más mediáticas de la Isla. Famosas en internet y popularizas por campañas publicitarias, hacen despertar el interés del visitante, que a veces se crea unas expectativas demasiado altas. «Sinceramente, esperaba más; no merece la pena haber madrugado tanto para entrar», confesaba en Cala en Turqueta un turista madrileño, Julio Torres.
«Sí que es espectacular, pero por lo que había oído pensé que iba a serlo mucho más», relataban en ese mismo arenal Iván y Vanessa, una pareja de Catalunya que se decantan más por el paisaje del que disfrutaron hace unos días en Pregonda. Por su parte, Jon Isasi, que no es su primera vez en la Isla, repetía ayer visita a Cala en Turqueta, una playa «muy bonita, pero con demasiada gente» comentaba a las 11 de la mañana. Y eso que, como advertía el socorrista de la playa, ayer no había fondeado las embarcaciones turísticas conocidas como ‘golondrinas'.
12 comentarios
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Que bien se está en las otras 180 playas de Menorca sin contar las dichosas de cada día. Sin aglomeraciones y con espacio para todos
Es cierto que últimamente se está vendiendo Menorca como destino de sol y playa y, lo que es peor, de fiesta. Un video de promoción de Vueling mostraba las calas totalmente vacías, con unas pocas personas jóvenes y sonrientes practicando deportes acuáticos. Solo eso: ni pueblos, ni taules, ni parets seques, ni langostas...Ni tan siquiera algún nativo menorquín...Y es cierto también que todos van a las playas de las fotos, ignorando que Menorca es una isla y que hay más de 130 lugares maravillosos en la costa para disfrutar del mar. Pero hay que ser comprensivos. Todos somos turistas, Cuando llegamos a una playa y la encontramos llena, nos enfadamos, pensamos que el resto de veraneantes es idiota, y nos olvidamos de que también nosotros estamos allí, ocupando un sitio.El que viene detrás nos incluirá a nosotros en el paquete de borregos que llena las playas...
Que tal si los Domingos solo se permitiese el acceso a las playas vírgenes para los Menorquines,así , quizás no les tendremos tanto rencor a los turistas
Quien dice playas vírgenes dice charcas de patos, porque así está el agua de revueltas. Y el arenal, bueno arenal no hay, toallas y sombrillas cual Benidorm.... La gente ve las postales o los anuncios y se deben creer que estarán solos... Viva Son Bou! Siempre habrá sitio para estirar la toalla sin tropezar, la sombrilla del vecino no te da la sombra y encima puedes llevar todo lo que necesites caminando unos minutos, o ir al chiringuito. Mejor que cualquier Cala "Virgen" En temporada.
Per jo sa gent pot anar hi a s'hora que vulgui, però que respectin sa velocitat indicada perquè circulen per camins asfaltats que són estrets i que tenen molts revolts amb molt poca visibilitat.
Y yo aun diria mas..tampoco son para tanto las playas....
Aprovechar mayo-junio y septiembre-octubre. Ese se ha convertido en nuestro verano, el verano de los menorquines. Eso tiene hacer del turismo nuestro principal sistema economico
Hoy por hoy, vista la saturación en esas playas llamadas vírgenes, es mucho más interesante ir a cualquier otra playa urbanizada, donde podrás acceder sin problema en tu propio coche y puedes aparcar tranquilamente. Además, al final te puedes encontrar más o menos el mismo nivel de ocupación, o tal vez incluso puede que menos, porque esas playas normalmente son más grandes, pero donde tienes servicios a mano, si quieres tomarte algo al fresco en una terracita de algún bar o chiringuito a la sombra, o necesitas por ejemplo un lavabo con agua corriente, para lo que necesites hacer.
Todo el mundo sabe (o debería saber) que en la vida no se puede tener todo. Queremos turismo pero no queremos que nos peten las playas. Esto es simplemente imposible porque vienen a Menorca, básicamente, por sus playas. Aunque yo no vivo del turismo y preferiría tener alternativas al "Menorca d'Or isla de vacaciones" si hemos decidido vivir del turismo tenemos que aceptar todas sus ventajas pero también todos sus inconvenientes.
No tenim cap ventatge es menorquins en comparació als turistes… es lamentable