Los patinetes pueden correr más en el puerto de Maó que en la ciudad

Dos son las diferencias principales. Una hace referencia a la velocidad. Si bien la ordenanza municipal establece una velocidad máxima de 25 kilómetros a la hora para circular por la calle, la normativa de Puertos la incrementa hasta los 30 kilómetros a la hora si se mueven por la calzada. En el caso de los carriles bici, inexistentes en el puerto, Autoridad Portuaria fija 15 kilómetros a la hora si está fuera de las aceras (menos que en el resto de la ciudad) y 10, si están integrados en aceras. No se permite a los patinetes eléctricos circular por «aceras, plazas, jardines y otros espacios públicos destinados en exclusiva a los viandantes».

La otra disonancia es que el casco homologado es obligado para el Ayuntamiento de Maó y recomendado para APB. No se hace mención expresa de la necesidad de contratar un seguro de responsabilidad civil, que sí establece para los vehículos en general, y ambas normativas coinciden en la edad mínima para conducir estos emergentes aparatos, los quince años.

En cuanto a otras cuestiones, la ordenanza para la circulación por los muelles establece una velocidad máxima general de 40 kilómetros por hora, así como horarios de verano y de invierno diferenciados para el aparcamiento de pago. Aun así, desde Autoridad Portuaria aseguran que su intención es mantener en el puerto de Maó la situación actual, con zonas de pago en todo el puerto en la temporada alta, y en temporada baja solo en un tramo, en las inmediaciones del muelle de cruceros, en horario matinal para promover la rotación.