La familia que ha regentado este establecimiento desde principios de los años 60, aguarda que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que incluye la Demarcación de Costas, resuelva la concesión del emblemático establecimiento integrado en cierta forma en el paisaje del litoral de Sant Lluís.
La concesión de este singular chiringuito, como la de otras muchas construcciones similares a lo largo de la costa española expiró en el año 2018 tras un periodo de tres decenios. Los concesionarios de «Los Bucaneros» solicitaron entonces la renovación del compromiso pero Costas aún no lo ha resuelto. El año pasado el establecimiento sí abrió al público pese a que tampoco entonces se conocía la decisión del organismo correspondiente.
En 2020 la situación de este paréntesis administrativo se ha visto agravada para los anteriores concesionarios por los graves desperfectos que causó el paso del temporal «gloria» a finales del pasado mes de enero.
El efecto de la borrasca destrozó gran parte de las pequeñas terrazas levantadas en el exterior del chiringuito que utilizaban los responsables gracias a una autorización de carácter especial. Allí disponían de unas diez mesas de madera con taburetes, bancos y sombrillas desmontables al final de cada temporada._Sin embargo, el paso del temporal llenó de escombros la zona que fueron retirados por empleados de Costas, pero las terrazas donde se colocaba el mobiliario no han sido repuestas.
Los responsables de «Los Bucaneros» tampoco han podido emprender las obras para reparar esta zona en la que atendían a los clientes puesto que sin la concesión no la pueden ejecutar. La ausencia de las mesas limita considerablemente el aforo del establecimiento y, con ello, merma el negocio del chiringuito.
14 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
lo de los precios de estos locales es vergonzoso, el otro cerca de ahi, por 4 calamares, 4 mejillones y un platito de ensaladilla rusa con unas cañas. 90 eurazos.
Una vez mas, la propia administración es la primera que sea pasa por forro su propia ley, la 39/2015 que establece los plazos de tramitación. ¿Con que cara vais luego a pedir a los demás que cumplan la ley y a sancionar, si sois los primeros en saltarla? INSEGURIDAD JURÍDICA Vergüenza de administración. ¿Para cuando un reglamento en que la propia administración sea sancionada y tenga que indemnizar al interesado por incumplimiento de plazos?
A mi lo que me preocupa es el olor putrefacto que hay en la playa!! El chiringuito está situado en un lugar susceptible de temporales y lo podían abrir en otra localización o en ninguna que tampoco es una necesidad!!
La costa es de todos y si esta libre de chiringuitos mejor, que compren un local detras y monten un bar, pero no hagan negocio “a costa” de espacio público
Mallorca regula el grifo competitivo, con una desfachatez inconmensurable, aquí la delegación de costas sólo se atreve a decir señor si señor sin levantar la voz, su valentía son las multas.
España ya hace años que va muy mal!
Tanto trabajo tiene Costas que nunca ha solucionado lo de Cala en Porter? Cobrar si que cobran cadas mes verdad?
LES HUBIERAN DADO UN SOBRE A CADA UNO QUE TRABAJA EN COSTAS PARA QUE ACTIVARAN EL ASUNTO YA ESTARÍA RESUELTO. PERO ESTO VALE MUCHO DINERO Y NO SE EL NEGOCIO DA PARA TANTO.
Lamentablemente seguimos en poder de los mallorquines, como se demuestra por la ineficacia de la administración que se dirige desde Mallorca. Los cuatro gatos de la oficina de Menorca de Costas poco pueden hacer, a pesar del buen trabajo que lleva a cabo su director y algún que otro funcionario. Pónganse las pilas y agilicen el PAPELEO que esta no es la única verguenza que sucede en esta administración. Menuda tropa nos gobierna. Salut a tots.
Otro ejemplo de la eficiencia de ciertos servicios públicos, cuyas consecuencias obligan al cierre de muchas empresas. y dejan a muchas familias sin ingresos, pero en fin, todo el mundo puede presentarse a las oposiciones., y toda crítica es por envidia. Este invierno lo comprobaremos en primera persona.