Huevos a precio de oro

Los países de la Unión Europea se han quedado sin huevos. El uso de un insecticida, el fipronil, se detectó en partidas producidas en 40 países, de los que 24 corresponden a la Unión Europea. Este insecticida está autorizado para combatir todo tipo de insectos, pero está prohibido en animales que vayan a entrar en la cadena alimentaria para consumo humano puesto que da lugar a residuos peligrosos para la salud. La existencia de estos residuos supuso el sacrificio de millones de gallinas ponedoras y el cierre de granjas contaminadas. Lo que se ha traducido rápidamente en una fuerte reducción de la oferta europea, que era una gran exportadora.

España se libró de esta contaminación, no hubo registros de su uso en granjas. Y desde el pasado mes de julio, se ha convertido en uno de los principales países proveedores de huevos para el resto de estados miembro de la Unión Europea a raíz de estos cierres de miles de granjas avícolas y del sacrificio de millones de aves.

España tiene, por tanto, más demanda que oferta, lo que se ha traducido en una espiral alcista de los precios que también tiene sus consecuencias para Menorca. Y es que, una gran mayoría de distribuidores menorquines compran los huevos a España. «Croacia ha firmado un contrato con España para hacerse con un 40 por ciento de la producción a un precio correcto, como Dios manda», explican desde la Granja Avícola Consell, «porque tienen necesidad de este producto». Y a mayor demanda, los precios se disparan. En su caso, explican que los incrementos rondan el 60 por ciento y aunque «hemos aguantado hasta finales de septiembre, no hemos podido retrasarlo más». Tras esta escalada, ahora los precios se han estabilizado, a la espera de cómo evoluciona a partir de ahora. Creen que esta crisis durará como mínimo medio año. Granja Avícola Consell indica que los huevos se vendían prácticamente a precio de coste, muy baratos. Y con estos incrementos «el precio es coherente, cierto es que podrían rebajarse 20 céntimos, pero no más».

Desde Karta & Memosa y Auxam apuntan a incrementos que giran en torno al 55 y 60 por ciento, respectivamente, con unos precios que han pasado del euro o los 1,15 euros de hace unos meses a los 1,60 o 1,85 que cuestan ahora a sus proveedores. «Compramos fuera porque aquí no hay suficiente producción», explican desde Auxam.

Diferente es la situación de S'Hort des Pont. Al ser «el único caso de granja que produce en Menorca», han decidido «seguir en la línea de agradecer la fidelidad del cliente y no sumarnos al carro de los precios». Y agregan que siempre se han mantenido al margen de la oferta y la demanda, ni cuando hay incrementos ni cuando hay bajadas.

Desde Karta & Memosa concluyen que «los proveedores no se han quejado, aunque haya subido mucho».