La Guardia Civil de Tráfico sí realizó actuaciones puntuales en las inmediaciones de las playas del sur. | R.L.

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La Guardia Civil informó antes del verano al departamento insular de Movilidad que no disponía de efectivos para destinar una patrulla regular a cada uno de los accesos a las playas vírgenes del sur de Ciutadella, que han registrado una notable presión humana desde el arranque de la temporada. Así lo confirmó ayer a «Es Diari» Javier López Cerón, director insular de la administración del Estado.

El portavoz del ejecutivo central detalló que el pasado 15 de marzo se celebró una reunión de coordinación en Ciutadella con mandos de la Benemérita y responsables del Consell, entre los que se encontraba el titular de Movilidad, Miquel Preto. Durante el encuentro, se estudió el escenario vivido durante los últimos meses: «Se explicó que no podía haber una patrulla en cada uno de los accesos de las playas, porque no es viable. Los efectivos de Tráfico en la Isla deben velar por la seguridad en los 357 kilómetros de carreteras de la red viaria, no vigilan aquellos puntos que elige el Consell. También avisamos de los posibles efectos que podría ocasionar el cierre de parkings en las playas del sur y el cambio de modelo decidido».

Por otra parte, López Cerón declaró que «lo que no puede ser es que cada vez que haya un problema en el departamento insular de Movilidad se culpe y responsabilice a la Guardia Civil, no es una postura seria». Y detalló que «entre los argumentos del conseller Preto se habla de alteración pública y en todo el verano solo se ha recibido una denuncia por un caso, relacionado con la sustracción de unas barreras en el camino de acceso a una de las playas».

Consultado por la posibilidad de aumentar la plantilla, explicó que «desde Interior defienden que los actuales índices de siniestros no hacen viable este incremento».