El alcalde de Es Migjorn, Pere Moll, este viernes. | Sergi Garcia

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El alcalde de Es Migjorn Pere Moll no solo no piensa dimitir sino que batallará hasta el final, ante el órdago lanzado por los que fueron sus compañeros de partido, los cinco concejales del PSOE que el lunes renunciaron a su áreas y dejaron al primer edil solo en el gobierno municipal.

La batalla se traslada al ámbito judicial, ya que Moll ha anunciado la mañana de este viernes que denunciará a los cinco regidores del PSOE por verter calumnias sobre él. Y emplaza a sus antiguos compañeros a hacer lo mismo: "Invito a los concejales a que si tienen alguna duda de mi gestión que acudan a la Justicia, como haré yo por calumnias", asegura.

No solo no está dispuesto a dejar la alcaldía sino que pide a los concejales del PSOE que sean ellos que dimitan y dejen el acta, lo que haría que la lista electoral corriese y pudieran subir afines a Moll. "Estoy súper legitimado [para seguir como alcalde] porque tuve los mejores y más contundentes resultados electorales de la historia del Ayuntamiento de Es Migjorn". En este sentido, destaca que tuvo más de 500 votos de los ciudadanos, y que estos valen más que los cinco votos de los concejales.