Salvador Botella durante una intervención en la que se dirige al portavoz socialista Vicenç Tur | Javier Coll

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El PP considera inaceptable el acuerdo «pactado con premeditación, nocturnidad y alevosía» para abonar a Hidrobal 569.992 euros por obras realizadas entre 2005 y 2007. Ese es el punto más cuestionado de los presupuestos municipales del año que viene, aprobados la noche de este lunes con doce votos a favor del equipo de gobierno y ocho en contra del PP. Estuvo ausente el concejal de Ciudadanos.

Salvador Botella se refirió a esta «herencia envenenada, un desaguisado del PSOE» del que alguien debería asumir responsabilidades políticas y manifestó tener sospechas de que pueda haber «informes técnicos que avalen este acuerdo», que tendrá, entre otras consecuencias un próximo aumento de las tarifas del agua.

Vicenç Tur rechazó cualquier sombra de duda, enumeró algunas de las obras pendientes de pago y aseguró que pudo haber errores en la tramitación «pero son inversiones realizadas», señaló el portavoz socialista. La alcaldesa dijo que efectivamente se actualizarán las tarifas, aunque como consecuencia de la política de agua y que la concesión a Hidrobal, sobre la que Ara Maó proponía estudiar su municipalización, no sufrirá alteración hasta 2019, año hasta el que está prorrogada.

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