El pirómano se enfrenta a una petición de 78 años de prisión por parte de la Fiscalía y de la Abogacía de la Comunidad, presente como acusación particular. Su defensa reclama que se le imponga únicamente una pena de cinco años a cumplir en un centro psiquiátrico porque mantiene que actuó bajo los efectos de un desorden mental.
La mayoría de los incendios que provocó el acusado con una vela y papel afectaron a superficies limitadas por la actuación de los servicios de emergencia. Casi en todas las ocasiones elegía el mediodía para actuar y se marchaba en coche del lugar de los hechos.
De todos los fuegos que provocó el de mayor gravedad fue el que se produjo el 27 de agosto de 2012 en Bendinat que afectó a 128 hectáreas. El siguiente en extensión quemó 16,6 hectáreas en Ets Alocs de Ferreries.
Desalojos
El grueso de la condena que solicita el fiscal se debe a los tres incendios que pusieron en peligro la vida de las personas, por lo que obligaron a desalojar viviendas. Uno de ellos se produjo el 14 de septiembre en Llucaitx Nou, en Es Mercadal. Ardieron 7,8 hectáreas.
Entre los 21 incendios que no obligaron a vaciar viviendas, tres tuvieron lugar en la Isla. El 10 de septiembre el pirómano hizo arder 4,2 hectáreas en S'Enclusa. El mismo día, media hora después, empezó el fuego que calcinó 16,6 hectáreas en Ets Alocs. El mismo día que el gran incendio de Es Mercadal se produjo un fuego en Sa Costa Nova de Ciutadella que afectó a 3,5 hectáreas.
El pirómano fue detenido el 23 de septiembre. Entonces residía en Ferreries con su compañera sentimental.
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