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La propuesta de disolución de la Junta Local de Fornells ha quedado aplazada. Tras una hora y media de debate en la sesión plenaria de este miércoles, el alcalde decidió posponer la votación ante las dudas legales que el PP había puesto sobre la mesa.

El motivo de este aplazamiento es básicamente jurídico, y el eje de la controversia es el reglamento de funcionamiento de la Junta Local. La propuesta que Francesc Ametller llevaba al pleno no incluía la derogación del reglamento, sino simplemente la disolución de la Junta y la creación de su sustituto, el Consell Social de Fornells. Sin embargo, el PP advirtió que si se suprimía la Junta sin derogar el reglamento, formalmente este organismo seguía vivo. Y tomar esta decisión sería, sentenciaron los populares, rotundamente ilegal y motivo de interposición de un contencioso-administrativo.

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La cuestión se planteó a las 20.20 horas, y las dudas generadas obligaron a hacer un receso en la sesión plenaria. Los portavoces de los diferentes partidos se reunieron con el secretario del Consistorio, quien pidió tiempo para valorar si la versión del PP era la correcta o si, como defendía él con anterioridad, la disolución de la Junta Local se podía llevar a cabo sin la derogación formal del reglamento.

¿Cuál es la diferencia de derogar o no el reglamento? Básicamente, tiempo. Si no hace falta eliminar el reglamento, la Junta puede disolverse de manera inmediata y acto seguido se aprueba el Consell Social. Sin embargo, si el procedimiento para eliminar la Junta exige la derogación del reglamento, la tramitación administrativa es mucho más larga. Hace falta una aprobación inicial por parte del pleno, exposición pública, resolución de alegaciones y aprobación definitiva. En definitiva, varios meses más en los que la Junta Local de Fornells seguiría funcionando.