La Casa de la Infancia separará en dos inmuebles diferentes a los niños menores de los mayores. Así lo comunicó ayer el Consell, que tras alcanzar un acuerdo con La Caixa para la sesión de un piso, trasladará a los mayores de 13 años a esta vivienda. Los niños de hasta 12 años seguirán en la actual residencia de la Casa de la Infancia.
El objetivo de este traslado es «facilitar así su emancipación», y por ello se incidirá «en las actividades domésticas de una casa», a la vez que se intentará mejorar su formación profesional «con la búsqueda de actividades formativas que mejoren su inserción en el mundo laboral»», asegura la consellera de Bienestar Social, Aurora Herráiz, que remarca que «esta reorganización ayuda mucho al tratamiento y la acogida por parte de la administración».
Todo ello ha sido gracias a la cesión de un piso por parte de la Fundació La Caixa, donde se podrán ubicar un máximo de seis menores de entre 13 y 17 años. El Consell por su parte se encargará de poner el personal necesario «para atender este colectivo las 24 horas del día y siete días a la semana». Concretamente se destinarán por turnos tres educadores y cuatro auxiliares de educador, además del apoyo de la psicóloga actual del centro residencial.
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