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El Consell ha decidido introducir algunas variaciones en su proyecto inicial para mejorar el tramo de la carretera general (Me-1) entre Ciutadella y Ferreries. Lo ha hecho a partir de las conclusiones del estudio de impacto ambiental redactad por los técnicos de la administración insular, un informe que pone sobre la mesa las tres alternativas que se barajaron antes de optar por el proyecto con terceros carriles y rotondas.

Una de las alternativas que se estudió fue el desdoblamiento, es decir, una vía con dos carriles por sentido. La propuesta que en su día defendía el PPha sido descartada, sobre todo, por su elevado coste económico. Así, el estudio de impacto ambiental cifra en 70 millones de euros el coste de esta actuación en el tramo entre Ciutadella y Ferreries.

El estudio introduce un método para calcular el tiempo de amortización de estas infraestructuras a partir de la reducción de los accidentes de tráfico que se conseguirían con la actuación. Así, se toma como punto de partida el índice de la Dirección General de Tránsito, que valora el gasto que representa una víctima mortal en la carretera en 1,4 millones de euros, un herido grave en 219.000 euros y un herido leve en 6.100 euros. Con este cálculo, entre 2005 y 2012, el tramo de la general entre Ciudadela y Ferrareis ha 'costado' 16 millones de euros.

En base a estos referentes, el estudio de impacto ambiental calcula que se tardaría más de 40 años en amortizar la inversión realizada en un hipotético desdoblamiento entre Ferreries y Ciutadella. Este es uno de los extremos peor valorados del desdoblamiento, que también obtiene un suspenso en materia de ocupación sobre el territorio y en impacto sobre el medio y el paisaje, y también en emisión de gases contaminantes. Sin embargo, el desdoblamiento aprueba en materia de seguridad y funcionalidad.


Nuevo trazado

Otra opción contemplada por el estudio de impacto ambiental es la construcción de una nueva carretera, con un carril por sentido, para unir Ferreries yCiutadella. En este caso, su coste sería de 40 millones de euros, y su periodo de amortización superaría los 30 años. Esta opción suspende en los mismos puntos que el desdoblamiento.


No hacer nada

La última opción contemplada en el estudio de impacto ambiental consistía en no hacer nada. Es decir, en dejar la carretera tal como estaba, sin intervenir sobre los giros a la izquierda ni en los puntos de tráfico lento. Esta opción solo obtiene buena puntuación en relación a la ocupación del territorio y en el impacto sobre paisaje y medio biótico.

Sin embargo, suspende en los otros puntos, incluso en el económico. En este aspecto, los técnicos advierten que «no actuar representa un coste asociado a las víctimas por accidentes que es muy elevado». De hecho, según los cálculos del informe, en los últimos años el 'coste' medio de los accidentes en la general entre Ferreries y Ciutadella es de 2 millones de euros al año.