Actividad. La participación ha sido el dato más relevante de esta XXIV edición - 4vents

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Ayer concluyó la Escuela de Salud Pública de Menorca, una edición marcada por la excelente respuesta de participantes y la positiva valoración de todos ellos en lo que se refiere a los aspectos académicos y de organización. Así lo asegura la directora, Marisa Rebagliato, a la hora de pasar balance de una convocatoria donde la figura de Josep Miquel Vidal estuvo muy presente y donde los representantes de las instituciones que hacen posible la organización de la Escuela ya tienen las miradas puestas en la próxima celebración del XXV aniversario.

La participación es, sin duda, el dato más relevante de la presente edición. Cerca de 480 personas han asistido a los cursos, encuentros, reuniones y los tres actos abiertos que se han celebrado a lo largo de toda la semana en el Lazareto y en la sede del IME. El hecho de que se haya cerrado la matrícula y se ha haya superado el cupo de plazas en varios cursos demuestra la buena salud de que goza la Escuela, en opinión de su directora. Un ejemplo de la buena acogida del programa académico es el encuentro de la Red Española de Universidades Saludables (REUS) que ha reunido en Menorca a 43 representantes de 15 universidades españolas; o el curso de Formación de formadores en salud comunitaria en el que han participado un nutrido grupo de médicos de Atención Primaria y que, además, ha abierto una puerta a la posibilidad de dar continuidad a la oferta formativa dirigida especialmente a los profesionales de este sector. También destaca en inscripciones el curso sobre Oportunidades de financiación europea de I+D+I en el área de ciencias de la vida para el período 2014-2020; el Taller de riesgo cardiovascular; y las sesiones sobre Nuevas técnicas para la evaluación de procesos en salud pública.

Desde el punto de vista cualitativo, las encuestas de valoración indican que los participantes otorgan un notable alto a toda la organización y contenido de la Escuela, con puntuaciones que superan los 4 puntos de un baremo máximo de 5, un elemento que sin duda contribuye al balance positivo de la organización.

Igualmente significativo es el interés que han despertado las tres actividades abiertas al público, no solo entre los propios participantes de la Escuela, sino también entre la sociedad.

Para los miembros del Consejo Académico, se trata de un hecho relevante que la Escuela se considere algo propio de la vida sociocultural de Menorca y que el debate sobre la salud se traslade más allá de los grupos de trabajo académicos.