Cae la facturación del turismo náutico al reducirse las esloras

Esta aparente contradicción se justifica según Sastre en el hecho de que la eslora de los barcos que buscan amarre en Menorca se ha reducido y, en consecuencia, la tarifa correspondiente por atraque es menor. El responsable de ANADE incide en que la elevada ocupación de agosto, no ha sido suficiente para compensar esta merma al estar los precios muy ajustados. De hecho incidió en que la mayoría son similares o más bajos a los existentes en toros puertos competidores. Y es que en general han proliferado las embarcaciones de menos de 12 metros y además el tiempo de estancia en las marinas ha disminuido. Apenas permanecen atracadas unas horas o un par de días, lo justo para realizar un pequeño avituallamiento o buscar abrigo los días de tramontana. "Hemos tenido muy buen tiempo este verano salvo varios fines de semana con viento del norte. Los barcos buscan menos el refugio del puerto y prefieren fondear fuera. En general el movimiento en el mar ha sido igual a otros años, pero se nota que el grueso de la temporada turística se reduce a agosto", señaló. En este sentido, añadió que en julio la ocupación fue sensiblemente menor al año pasado, mientras que el mes de junio se comportó mejor de lo esperado.

Las siete instalaciones náutico deportivas asociadas a ANADE gestionan algo más de un millar de amares, cerca del 70 por ciento de las plazas disponibles en Menorca. Así destacan los puntos de atraque de S'Altra Banda y la Colàrsega del puerto de Maó que gestiona Marina Deportiva, los que posee Sunseeker, los atraques de Cala en Bosc, Puerto Addaia y el Club Náutico de Fornells.