Un nuevo fuego en Cala Fustam refuerza la sospecha de una autoría intencionada

De nuevo, la rápida respuesta de los equipos del IBANAT y del Parque de Bomberos de Menorca fue esencial para tener controladas las llamas a las 15.15 horas.

Aunque fueron vitales las descargas de agua de mar de dos aviones anfibios que el IBANAT desplazó desde Mallorca y que se restaron a los efectivos de lucha contra el gran incendio en la Serra de Tramuntana. Los medios aéreos cargaron agua en la zona de Sant Tomàs, despertando la expectación de los bañistas, que desde Binigaus y la urbanización veían la inmensa columna de humo que salía de Cala Fustam.

Según fuentes técnicas consultadas, el foco de ayer prendió en un punto próximo a la zona quemada el sábado. "Es difícil que haya sido a causa de un rescoldo porque la pequeña zona incendiada se dejó bien apagada y refrescada y los efectivos acudieron también al día siguiente. Si bien tampoco es imposible, aunque todo apunta a un mismo modo de actuar", señalan. Las llamas arrancaron detrás de la playa, al lado del camino que comunica Cala Fustam con Trebalúger. Se trata del sendero litoral, no del Camí de Cavalls, que en este punto se interna tierra adentro.

El SEPRONA y los técnicos de Medio Ambiente prosiguen con la investigación abierta, con total hermetismo. El director insular de la Administración General del Estado, Javier López-Cerón, mantiene la cautela y ayer no quiso revelar ninguna pista para no entorpecer la investigación.

Tras tener controlado el fuego, los agentes del IBANAT y los bomberos prosiguieron las tareas de extinción hasta la puesta de sol. Durante la noche, un retén del IBANAT permaneció actuando en la zona, a la espera de continuar hoy, ya de día, con las tareas de extinción.