Siempre le he admirado como filósofo pero no entiendo su deriva nacionalista españolista.
Es muy sencillo, soy español. Es diferente que uno sepa que es de una nación que ser nacionalista, lo mismo que es distinto tener apéndice que tener apendicitis, que es una inflamación. Todos los Estados están formados por naciones, el nacionalismo es una inflamación de la nación.
En educación ¿cualquier tiempo pasado fue mejor?
No, ni muchísimo menos, basta leer a Dickens, cuando se educaba con una vara o la educación era para grupos muy pequeños y la mayor parte de la sociedad no estaba educada. O recordar ese refrán de "pasas más hambre que un maestro de escuela". La figura del maestro ha estado mucho más denostada de lo que está hoy.
Si algún día fuera ministro de Educación ¿cuál sería la primera medida que tomaría?
No creo que eso suceda pero procuraría no ponerme estupendo en seguida, sino continuar lo que se hace mejor y cambiar lo otro. Y para ello hay que hablar con la gente, estar a pie de obra, no crear leyes que aumenten la confusión.
¿Cuáles son para usted los aspectos buenos y malos de la Ley Wert?
De las cosas que conozco, no me gusta la supresión de Educación para la Ciudadanía, porque es una asignatura de sentido común, pero ha chocado con prejuicios clericaloides y con incomprensiones. Otra cosa que no me gusta es que se pueda separar por sexo en las aulas, porque éstas tienen que ser un reflejo de la sociedad, de su pluralidad. La petición de esfuerzo es buena, pero aún no se sabe bien lo que se contempla.
¿Hay que educar en el esfuerzo? ¿Qué opina de que se exija una nota de 6,5 para obtener beca?
Hay que educar para vivir mejor y ser más felices, la educación no está hecha para formar empleados, sino personas libres y capaces. Claro que las cosas buenas requieren un esfuerzo, educarse cuesta, pero no debe ser una tortura. El esfuerzo debe de ser un medio no el objetivo. En cuanto a la nota, es una forma de valoración, hay que tener baremos. Y en cuanto a las becas, no es lo mismo en Primaria o Secundaria que en la Universidad. No hay obligación de ser universitario, y cuando socialmente se va a invertir más de lo que ya se invierte en un universitario, no me parece disparatado que se pida un nivel.
¿Hoy día los profesores sienten una mayor desmotivación?
Los maestros se sienten muchas veces abandonados. Cuando ustedes ven un debate e invitan a alguien de la educación siempre es un catedrático, cuando en realidad son los maestros de la primera y segunda enseñanza los que están en contacto con la base de la educación, los niños. Tienen poco reconocimiento social, y esa desvalorización se une a la falta de respeto. El respeto no tienen que ganárselo, tienen que tenerlo garantizado. Los maestros están cansados del poco y mal caso que les hacen.
En lugar de la igualdad asimétrica ¿no hubiera sido más honesto por su parte proponer el tratamiento desigual en favor del castellano?
La asimetría es que existe una lengua común, para todo el Estado, y otras en diferentes partes del Estado, y eso ya estaba recogido en la Constitución de 1931 de la República española. Eso no impide que en los lugares donde hay una lengua propia ésta coexista en igualdad con la lengua común.
¿Es posible un mundo mejor, de realidades y no de palabras, no un mundo del norte, sino del norte y del sur?
No podemos aspirar a acabar con todos los males pero sí con algunos. No sé si esto es o no pesimismo, solo puedo decir que nacemos y moriremos rodeados de males, a lo único a lo que podemos aspirar es a que los males del final no sean iguales a los del principio.
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