Ensayo. Ayer se reunieron en Ciutadella cerca de 120 voces - Gemma Andreu

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El Fons Menorquí de Cooperació continúa con los preparativos de su 20 aniversario, una cita para la que están organizando un ambicioso proyecto, un multitudinario concierto de voces solidarias. Ayer tuvo lugar en la Catedral de Ciutadella un nuevo ensayo del espectáculo, en el que participaron cerca de 120 personas de la zona de Ponent con el propósito de seguir puliendo detalles de cara a las dos actuaciones previstas, el 1 de junio en la Catedral (21 horas) y al día siguiente en el Teatre Principal de Maó (19.30 horas).

Se trata de una iniciativa que comenzó a gestarse a finales de 2012, y que tiene como propósito invitar a todas las personas de la Isla a formar parte de una gran coral participativa para cantar a favor de la solidaridad. "El Fons nació en los años 90 en un contexto de crisis a partir de la firme convicción de un grupo de personas que creía que un mundo mejor es posible. Ahora, 20 años después, la globalización nos ha demostrado que todas las regiones del planeta son interdependientes y que lo que sucede en el lugar más recóndito del mundo afecta a todos. Por tanto, queríamos un acto de conmemoración que recogiese el espíritu de unión y participación ciudadana para caminar hacia un mundo más justo", explica uno de los miembros del Fons, Maria Jesús Barceló.

El espectáculo que se está preparando no será un concierto al uso. No habrá público, sino participantes. De momento se cuenta con cerca de 300 personas que están acudiendo a los ensayos, pero el acto está abierto a todas las personas, con y sin formación musical.

Desde el Fons se ha puesto a disposición de quienes se quieran unir a la causa 1025 entradas para aquellos que no están participando en los ensayos previos. El reto es logra llenar los aforos de la Catedral (400) y el Principal (800). Las invitaciones se pueden recoger en todos los ayuntamientos, el Consell insular y el Teatre Principal.

Abierto a todo el mundo
Desde la organización hacen especial hincapié en que no se requieren conocimientos musicales para poder unirse a esta gran fiesta. Así, el verdadero reto de la iniciativa reside en lograr un armonía entre un grupo tan heterogéneo. Eso sí, cuentan con la base de nueve corales con experiencia. Por el momento, se han sumado las escolanías de la Catedral y Ciutadella, las corales S'Estel y Canticus, los coros Cadenza, Gospel de la Fàbrica de Músics, Ángel Ruiz y Pablo, Som Gospel y Femení de Cambra de l'Ateneu de Maó.

La grandeza de la iniciativa reside en poder juntar tanta gente, y de todas las edades, cantando al unísono. Como por ejemplo a Carla Benejam, de 26 años, una chica formada en el mundo del gospel y con experiencia en el rock, con Carmen Durà, una mujer de 71 años, 15 de ellos cantando con la coral de S'Esplai. La clave para que la unión funcione, según explica una de las directoras que participó en el ensayo de ayer, Corretja Genestar, se fundamenta en buscar "una tesitura cómoda" para que todo el mundo pueda participar sin dificultades.