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Me llamo Juan Sánchez, nací en Elda, Alicante, hace 40 años y llevo 13 viviendo en Menorca. Estoy casado con Valentina y nuestro hijo se llama Serafín. Mis padres viven en Alicante, precisamente mi padre es quien me enseñó siendo pequeño a querer la montaña. Trabajo como forestal en IBANAT y mis aficiones principales son el alpinismo y la escalada.

Está organizando una expedición al Aconcagua, la montaña más alta del continente americano, ¿qué le empuja a ello?
Será la cuarta vez que realice este ascenso y he realizado otros muchos porque me apasiona el alpinismo y la escalada. De momento somos cuatro personas las que nos aventuramos nuevamente a ello, pero contamos que se puedan sumar otras cuatro más. Dentro de un mes haremos una reunión y el viaje está previsto para el 15 de diciembre y durará 13 días.

Aunque estén invitando a quien quiera sumarse a la aventura no todo el mundo puede hacerlo, ¿cierto?
Efectivamente, uno tiene que reunir unas condiciones físicas determinadas. Los riesgos son importantes, y no los niego nunca, uno tiene que poder soportar temperaturas de 40 grados bajo cero, principios de congelación y falta de oxígeno. En la montaña encuentras los límites físicos del cuerpo. También hay que tener en cuenta que todo tiene un coste aunque estamos buscando quien financie al menos parte del proyecto.

¿Se puede explicar con palabras lo que se siente al llegar a la cumbre?
No me importa confesar que llegué llorando cuando hice la cumbre del Aconcagua por primera vez, y única hasta ahora, en 2008. En la primera ocasión y la tercera que lo intenté no llegué a la cumbre. La montaña, aún siendo la misma, cada vez es diferente, las condiciones meteorológicas influyen mucho.

La cumbre no está asegurada ¿verdad?
Cierto, y no importa si no puedes llegar porque significa que has salvado tu vida. Montañas más pequeñas que el Aconcagua me han echado atrás, recibes entonces una lección, la montaña en ese momento te pone en tu sitio.

¿Cómo va a ser la expedición que preparan?
Empezaremos la ascensión desde el Parque Nacional del Aconcagua hasta el primer campo base que está a 3.200 metros de altitud. Pasaremos dos noches allí para aclimatarnos y haremos unas excursiones. Luego subiremos hasta el campo base Plaza de Mula que está a 4.100 metros de altitud donde pasaremos dos noches más y subiremos a Boneto que está a 5.100 metros de altitud. Los que presenten buenas condiciones físicas y pasen los análisis podrán empezar allí la verdadera ascensión al Aconcagua en estilo alpino durante dos o tres días hasta la cumbre y luego está la bajada. En Argentina tenemos un contacto, Virginia Cocorda, que se encarga de realizar todos los trámites y pedir los permisos.