La junta de gobierno del Consorcio de Residuos Urbanos y Energía de Menorca ya ha formalizado el contrato para la ejecución de las obras de la primera fase de ampliación del vertedero de residuos no peligrosos de Milà II. La empresa Antonio Gomila SA será la que ejecute las obras por un importe total, impuestos incluidos, de 2,6 millones de euros.
Esta oferta supone una rebaja de 1,2 millones de euros respecto del presupuesto base de licitación que se fijó en 3,9 millones (3,3 millones sin impuestos).
Las obras de esta primera fase ocuparán cuatro de las nueve hectáreas de que está prevista la ampliación total del vertedero controlado y que actualmente ocupa una superficie de seis hectáreas.
Tal y como se indica en el pliego de condiciones técnicas, la vida útil de Milà II estaba fijada hasta 2008 debido al elevado crecimiento de la generación de residuos. Es por este motivos que surge la necesidad de ampliar el vertedero.
Las obras de la primera fase incluyen una excavación del vaso de vertido y la impermeabilización de la zona, así como la instalación de una red de tuberías para conducir los lixiviados (los líquidos que genera el vertedero) hasta el punto más bajo del fondo del vaso donde se ubicará el punto de recogida y desde donde se podrá bombear hacia el sistema general de recogida de lixiviados del vertedero. Los trabajos también contemplan el drenaje de pluviales.
El concurso abierto por el Consorcio de Residuos Urbanos y Energía de Menorca para este proyecto de ampliación del vertedero de Milà II ha contado con un veinte ofertas de empresas. El proyecto con el presupuesto más bajo cifró el coste de las obras en 1,9 millones de euros mientras que la oferta más elevada se fijó en 3,2 millones, tal y como se anuncia en la Plataforma de Contratación del Estado. La oferta más económica puntuaba un máximo de 50 puntos sobre cien, otros cuarenta se otorgaban según la propuesta técnica y los diez puntos restantes, a la mejora del plazo de garantía total de la obra sobre el mínimo exigido.
La empresa adjudicataria cuenta con un plazo de ejecución de la obra de siete meses.
El Consell advirtió a principios de 2012 que si el Consorcio no ejecutaba las obras este año perdería la ayuda que Europa ha destinado a Menorca para la gestión de residuos domésticos e industriales, alrededor de dos millones de euros. Partiendo de este hecho, es probable que las obras de ampliación comiencen en breve.
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