Diez acusados de narcotráfico se enfrentan a 118 años de prisión

Según señala el escrito del Ministerio Público, la droga era introducida en la Isla por una persona no identificada, conocida como "Riffi o Riffino", vía marítima, a través de vehículos camuflados en los buques que cubren la ruta Barcelona-Maó.

El 8 de junio de 2009 desembarcó del buque "Ramon Llull" de la compañía Baleària procedente de la Ciudad Condal uno de los intermediarios conduciendo un vehículo marca Audi. En uno de los asientos, la Policía Nacional encontró dos envoltorios de cocaína con un peso total de 1.630 gramos, con una pureza del 29,04 por ciento, resultante de una cocaína pura con un peso de 472 gramos. El valor en el mercado ilícito alcanzaba los 55.920 euros. La droga "cocaína y hachís" iba destinada a varios de los acusados para su posterior venta en la Isla. Algunos de ellos se encargaban de la preparación de bolsas de cocaína y recaudar el dinero.

En uno de los registros realizado por la Policía en un domicilio de Sant Lluís, propiedad de la abuela de uno de los acusados, los agentes encontraron una caja de madera con cannabis tipo hierba con un peso de 1.421 gramos; nueve envoltorios de cocaína con un peso total de 768 gramos y un valor en el mercado de 25.509 euros, además de 215 tabletas de cannabis. En otro de los registros en un vehículo, los agentes encontraron dos envoltorios de cocaína y dos tabletas de cannabis.

La Policía también halló en una casa de Ciutadella varios trozos de cannabis y en una cochera alquilada de Maó, tres bolsas de cocaína.

El fiscal solicita para nueve de los acusados, una pena de 12 años de prisión para cada uno y una multa individual de 633.556 euros. También solicita la misma multa y diez años de prisión para otra de las integrantes de esta organización que el próximo 19 de octubre será juzgada en Ciutadella por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial desplazada a la Isla.