Dique. El buque Nura Nova operó ayer con normalidad - Paco Sturla

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Los fuertes vientos que durante las últimas horas han azotado Menorca han impedido que llegaran las tormentas que se esperaban. Así lo explicaban ayer desde la delegación de la Agencia Estatal de Meteorología en Mallorca, la cual había pronosticado que durante la noche del jueves al viernes hubiera precipitaciones abundantes.

El portavoz de la AEMET, Miquel Gili, señalaba ayer que "en Menorca no ha llovido nada por el viento de tramontana, que no ha dejado crecer las nubes y, con ello, las tormentas".
Sin embargo, las previsiones para los tres próximos días indican que lloverá en Menorca, aunque serán precipitaciones débiles o moderadas. "Esperamos que llueva mañana (por hoy), el domingo o el lunes, aunque sea poco, especialmente mañana".

El estado del mar

Gili señaló también que no se ha decretado ninguna alerta por fenómenos meteorológicos adversos. En cambio, sí que "hay un aviso por el estado del mar, por olas de más de 2,5 metros, tanto mañana como el domingo".

De hecho, según informó el responsable de la AEMET, las previsiones que había para ayer eran de olas de entre los 2,5 y los 4 metros, unas estimaciones que se cumplieron, "especialmente en la costa norte de Menorca".

El mal estado del mar provocó que ayer, el buque de alta velocidad "Jaume I" de Baleària, que enlaza Barcelona, Alcúdia y Ciutadella tuvo que cancelar sus servicios, mientras que el "Martín i Soler" se desvió a Maó para su conexión con Barcelona. Las cancelaciones obligaron a que, para hoy, la compañía haya programado tres servicios especiales con el ferry "Daniya", para dar solución a los pasajeros que debían viajar con el fast ferry. Mientras, tanto Iscomar como Acciona pudieron realizar sus trayectos.