TW
0

autoficha
Me llamo Marta Frau, tengo 27 años y nací en Palma donde resido la mayor parte del año. Soy psicóloga especialista en adicciones. Veraneo en Menorca desde que tengo tres años y durante una temporada también trabajé en la Isla. Estos días estoy disfrutando de sus playas y sus fiestas. Me encantan los caballos, sobre todo los de Sant Joan. Mis principales aficiones son viajar a Tailandia, donde vive mi padre desde hace veinte años; leer novela negra, el cine y escuchar todo tipo de música. Creo que hay que perder el miedo a acudir al psicólogo.

¿Qué clase de adicciones trata?
Principalmente trato adicciones relacionadas con sustancias como, por ejemplo, la cocaína, el alcohol o el cannabis. Aunque en la actualidad debido al incremento de adicciones relacionadas con las nuevas tecnologías mi área de actuación se ha visto ampliada. También trato casos de dependencia a la comida, a las compras y al trabajo.

¿Cuál es la cara menos amable de las nuevas tecnologías?
Es el uso que algunas personas le dan a todo lo vinculado con internet. El juego online es uno de los peores enemigos que tienen las personas que intentan superar una relación problemática con el juego. En cuestión de meses han proliferado las páginas en la red que permiten apostar sin límite y sin control alguno. El "face to face" ya no es necesario. Las nuevas tecnologías posibilitan que las personas se relacionen sin mantener contacto físico, un hecho que en el caso de los individuos que padecen un trastorno psicológico les facilita aislarse del mundo.

¿Está a favor de que los niños interactúen con el iPad ahora que está tan de moda?
Totalmente a favor siempre y cuando el uso que hagan los más pequeños del dispositivo esté siempre supervisado por un adulto en cuanto a contenidos y en cuanto a horas invertidas.

¿Con la crisis que vivimos se han incrementado los casos de adicción al trabajo por miedo al despido?
No hay más casos, pero las personas que ya padecían este tipo de patología han incrementado las horas de su jornada laboral por miedo a que sus empresas vayan mal o a ser despedidos.

¿Cómo se manifiesta la dependencia al trabajo?
Se trata de individuos que únicamente viven por y para trabajar. En algunos casos llegan a tener jornadas laborales de más de 19 horas, olvidando su vida social y familiar. Las consecuencias más acusadas son los divorcios y el estrés que puede provocar importantes problemas cardíacos.

Veranea en Menorca desde hace más de veinte años, ¿cuál es su primer recuerdo?
La grosella mezclada con agua fresca y los paseos "en velo" por el Camí de Sa Farola, en Ciutadella, mucho antes de que estuviera asfaltado.

¿Cuál es su rincón favorito?
La playa de Cavalleria y sus atardeceres. Allí buceo durante horas perdiendo la noción del tiempo. En invierno me decanto por Sa Mesquida.

¿Por qué cree que la gente es tan reticente a ir al psicólogo?
Sigue existiendo la creencia de que el psicólogo es para los "locos", pero hay que perder el miedo a acudir a un buen especialista cuando se necesite.