Como cada verano desde 2005, en Ciutadella se ha puesto en marcha la unidad de la Policía Local del Servicio Especial de Control de las Ordenanzas Municipales (SECOM) en las playas de la localidad, un dispositivo a través del cual se han puesto ya 18 denuncias durante los meses de mayo y junio.
Según informó ayer el subinspector, Francesc Pallicer, la unidad se puso en servicio durante el mes de abril para revisar e inspeccionar los caminos rurales y los accesos a las playas, y hacer un control de las llaves de los portones facilitadas por los propietarios de las fincas por donde los agentes acceden a las calas. Asimismo, Pallicer indicó que este año, al igual que el anterior, el número de agentes destinados al SECOM es de dos, la mitad que en ejercicios anteriores cuando había dos unidades de dos miembros cada una. Sin embargo, este dispositivo no ha podido mantenerse al haberse incorporado sólo 8 de los 13 policías turísticos que se habían presupuestado.
Controles y denuncias
El oficial responsable de la unidad del SECOM, Joaquín Salvador, detalló que durante el mes de mayo se produjeron un total de 50 controles que sirvieron para interponer 12 denuncias. La más repetida fue por incumplimientos de la Ley de Costas en relación a fondeos irregulares o por acceder las embarcaciones en las zonas delimitadas para el baño, por lo que se remitieron a la Demarcación de Costas. Estos hechos motivaron hasta siete denuncias, mientras que las cinco restantes fueron por acampadas, encender hogueras, tener perros sueltos en la zona de baño y por venta ambulante ilegal.
Ya en junio, los agentes del SECOM realizaron 24 controles que terminaron en seis denuncias, cuatro de ellas por cuestiones relacionadas con la normativa de Costas. Las otras dos fueron por el incumplimiento de la ordenanza municipal en cuanto a la presencia de perros en la zona de baño, y otra por acampar.
Más concienciación
Tanto Pallicer como Salvador coincidían al señalar que de "cada vez hay más concienciación, la gente sabe que no se pueden encender hogueras y que no se puede acampar". Es más, el oficial responsable del SECOM apuntaba que "lamentablemente son incendios como el de Valencia o el de Eivissa del año pasado los que crean concienciación".
No sucede lo mismo con los propietarios de embarcaciones, que muy habitualmente invaden zonas reservadas a los bañistas, varan las barcas sobre la arena o fondean de forma irregular. Es pues entre este colectivo en el que está costando más inculcar el respeto a la normativa. En cuanto a las acampadas, los agentes recordaron que sí que se puede pernoctar en las calas, siempre que no se instalen tiendas de campaña, se enciendan hogueras y no se invadan zonas protegidas.
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