El equipo de gobierno de Maó se baja el sueldo un 5 por ciento

Se trata de medidas de carácter eminentemente ejemplificador a las que se sumarán a corto plazo otras actuaciones tales como la revisión del capítulo de inversiones, la reducción de la partida destinada a las fiestas patronales o la revisión de las subvenciones, tal y como avanzó el teniente de alcalde de Servicios Generales, Salvador Botella, quien tendió la mano a la oposición a la hora de acordar otro tipo de reformas de carácter estructural.

En concreto, el concejal hizo especial hincapié en el debate pendiente sobre la gestión compartida de los servicios sociales, las competencias municipales o la posibilidad de adecuar el volumen de la administración. El portavoz del Grupo Socialista, Vicenç Tur, recogió el guante y, a pesar de que tan solo dos semanas atrás dio por roto el pacto de estabilidad con el PP a través de los medios de comunicación, apostó de nuevo por el diálogo.

Las dificultades económicas por las que pasa el Ayuntamiento fueron la baza del equipo de gobierno a la hora de votar en contra de la mayoría de propuestas de los socialistas quienes, por su parte, lamentaron que el PP se haga eco siempre de la "cancioncilla" de la herencia del anterior ejecutivo local. Botella comprendió el mensaje y, aunque acusó en diversas ocasiones al PSOE de incoherencia y demagogia, señaló durante una de sus intervenciones que la voluntad de los populares es "siendo conocedores del pasado, actuar con firmeza para garantizar un futuro". En este punto, el concejal parafraseó al presidente de la Generalitat, Artur Mas, quien durante su toma de posesión hizo alusión al "pulso firme, al corazón caliente y a los pies en tierra".