Un estudio científico demanda la creación de una figura de regulación de la pesca en la zona marina del parque natural de S'Albufera des Grau.
El trabajo, encargado el año pasado por el Govern balear y realizado por el Institut Menorquí d'Estudis y el OBSAM, concluye que en la zona comprendida entre el puerto de Addaia y la Punta de Sa Galera (ver mapa) se detecta una escasez de ejemplares adultos, lo que implica que las especies de mayor interés pesquero son, en general, de pequeño tamaño.
Ante esta situación, que el estudio detalla ampliamente, se propone la creación de una figura que regule la pesca en la zona. En este sentido, los autores del informe aseguran que "se ha demostrado que la implantación de áreas marinas protegidas es una excelente herramienta para la protección de la biodiversidad marina y la conservación de los recursos. Lo es porque el hecho de reducir la mortalidad por pesca en las reservas marinas repercute en un aumento de la abundancia de ejemplares maduros, asegurando el reclutamiento y mejorando las capturas en las áreas abiertas a la pesca".
En base a esta tesis, el informe propone el establecimiento de una reserva pesquera con diferentes zonas de protección, puesto que el área abarcada es muy amplia y diversa. Así, cabe recordar que el área marina del Parque Natural de la Albufera des Grau tiene una superficie de 1.745 hectáreas, e incluye seis islotes: Illa den Colom, Illa Gran d'Addaia, Illa Petita d'Addaia, Illa de ses Àguiles, Illot den Carbó e Illot den Carbonet.
Así, los científicos proponen dos zonas en las que deberían aplicarse las máximas restricciones.
La primera, con una extensión de 146,8 hectáreas, comprendería la bahía de Addaia, los islotes de Addaia y la zona de Armaris. Ésta sería, básicamente, la zona de reproducción de las especies vulnerables a la pesca. El segundo espacio con la máxima protección sería el comprendido entre la Punta de Cala en Caldés y el Cap de Mossèn Vives. En total, 758,8 hectáreas ideales para el crecimiento de los ejemplares de peces.
En el resto de zona marina del Parque Natural, se propone que se permita la pesca desde el mar pero controlando su intensidad. En esta línea, y con el objetivo de proteger a la población adulta, los autores del informe desaconsejan que se siga permitiendo, aunque sea de manera parcial, la pesca submarina.
Esta propuesta no deja de ser un estudio científico, encargado en su día por el Govern balear. Ahora, habrá que ver si la Administración autonómica considera los argumentos expuestos por los científicos, y adopta alguna medida restrictiva de la práctica de la pesca.
De ser así, la reserva marina del Parque Natural de S'Albufera des Grau sería la segunda de la Isla, y estaría también ubicada en la costa norte, como la ya existente.
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