Los ambulantes de la Explanada de Maó denuncian la supresión de doce puestos

Tras numerosas reuniones infructuosas con el director económico del Ayuntamiento, Manolo Yebra, el colectivo remitió a finales del pasado mes de mayo una carta dirigida a la alcaldesa, Águeda Reynés, a través de la que mostraban su malestar en relación a esta medida y exigían una rectificación. Hoy, un mes después, todavía no han recibido respuesta alguna. "Nos da la sensación de que nos ignoran y de que no les preocupamos nada", lamenta la vicepresidenta de la asociación, Maine Albaya.

De momento, los vendedores afectados no han tenido más remedio que acatar la decisión y, desde el mes pasado, el mercadillo de la Explanada cuenta con doce paradas menos. En concreto, el Ayuntamiento ha suprimido cinco puestos situados en la zona de la parada de taxis, así como otros ocho tenderetes, cuatro de ellos ubicados frente al establecimiento de comida rápida Burger King.

"Nos dijeron que la eliminación de estos cuatro puestos respondía a la voluntad de dedicar este espacio a la organización de acontecimientos diversos", explica Albaya quien, no obstante, asegura que desde que se comenzó a aplicar esta medida no se ha llevado a cabo ninguna actividad. "Le pedimos al director económico del Ayuntamiento que nos facilitara el calendario de eventos previstos en la zona y tampoco lo conseguimos", añadió.

Asimismo, los comerciantes pusieron sobre la mesa la posibilidad de que los vendedores cuyos puestos se encontraban frente al Burger King pudieran continuar ocupando el mismo espacio y, en caso de celebrarse alguna actividad durante los días de mercadillo (martes y sábados), fueran reubicados en otra zona. "Ni tan siquiera tuvieron en cuenta nuestra propuesta", se queja la vicepresidenta.

Después del verano

Más moderada, la presidenta de AVAM, Montserrat Carbonell, remarca que, por el momento, el colectivo no tiene previsto organizar acciones de protesta. Más allá de la misiva entregada a la primera edil, Carbonell apuesta por aguardar hasta el final de la temporada turística para retomar las negociaciones. "Dudo que este verano pueda arreglarse la situación y, al tratarse de los meses de más trabajo, lo más adecuado es esperar hasta que finalice la temporada estival", recalca.

Sin embargo, la presidenta considera que la justificación en la que se ha escudado el Ayuntamiento a la hora de suprimir las paradas no es "lógica". En este punto, señala que los principales afectados por esta medida serán los vendedores suplentes y aquellos que están en lista de espera para obtener una licencia puesto que los tenderetes eliminados no estaban adjudicados.

"Hay que tener en cuenta que están eliminando puestos de trabajo en un momento muy complicado a nivel económico", asevera Carbonell, quien apunta además que a finales del mes pasado, cuando se comunicó la supresión de las doce paradas, la mayoría de comerciantes en régimen de suplencia ya habían hecho frente a las inversiones para comprar el género y a los gastos de alta de la actividad.

"Es un tiro por la espalda a los vendedores que ejercen su actividad como suplentes, así como una falta absoluta de sensibilidad en relación a la actividad económica que llevan a cabo", señala la misiva hecha llegar a la alcaldesa.

Por otro lado, el colectivo subraya que el Ayuntamiento verá reducidos también sus ingresos por el alquiler de la vía pública. "Siempre dicen que les hace falta dinero, por eso no entendemos el motivo de esta decisión", concluye la vicepresidenta de la asociación.

A la espera de recibir noticias por parte del equipo de gobierno, la Asociación de Vendedores Ambulantes de Menorca reclama la reposición de los puestos eliminados frente al Burger King, así como de la parada suprimida en la zona del los campos de petanca y los tenderetes que hacen esquina junto a la parada de taxis, ya que consideran que su eliminación no supone ningún beneficio en cuanto a la fluidez de paso de los viandantes.