El presidente del Consell, Santiago Tadeo, explicó a los alcaldes los proyectos tecnológicos - Paco Sturla

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Consultar el correo electrónico, subir una fotografía, buscar información sobre un destino de vacaciones, desarrollar un trabajo escolar o simplemente entrar en alguna red social será en unas semanas misión posible en aquellos hogares que a día de hoy no disponen de conexión 'on line' por falta de cobertura.

La nueva red pública de internet ha entrado en su recta final y las previsiones apuntan a que la implantación de este proyecto, que ya está completado en un 90 por ciento, esté concluida antes de que acabe el mes.

La empresa Infotelecom Networks S.L., adjudicataria del contrato del proyecto y del despliegue de la nueva infraestructura pública de comunicaciones inalámbricas para prestar servicio de internet de alta velocidad a toda la Isla, está ultimando los dos últimos nodos. Según avanza la consellera de Servicios Generales, Innovación y Trabajo, Pilar Pons, su activación y puesta en marcha se ha demorado por el mal tiempo de estos días.

Así es como, a falta de que se activen las dos últimas torres de transmisión de las 16 de que consta el proyecto, el servicio ya están beneficiando a 250 hogares que solicitaron el acceso a esta red pública. No obstante, las expectativas son mucho más notables puesto que el cálculo de clientes potenciales que pueden acogerse a esta iniciativa por tener baja o nula cobertura de acceso a la red alcanza los mil abonados. "Este proyecto posibilita el disfrute de una conexión a internet a una velocidad similar a la banda ancha, como la ADSL, a unos precios muy atractivos y competitivos", explica la responsable insular de Innovación, con una tarifas para usuarios residenciales que oscilan entre los 24,58 euros mensuales -si la contratación es de un mega de velocidad- y los 38,90 euros si se contrata internet avanzado de seis megas.

Pons defiende contundente el proyecto "Menorca Accessible" y afirma que a día de hoy "internet ha dejado de ser un lujo para convertirse en una verdadera necesidad" por lo que "es un derecho universal al que todos debemos tener acceso". Con ello, asegura que las zonas rurales, cuya ubicación suele complicar el funcionamiento de la telefonía, van a ser uno de los grandes beneficiarios, puesto que, por un lado, el acceso a las nuevas tecnologías va a facilitar el trabajo en el campo y, por otro, ayudará a los hijos en edad escolar en su rutina diaria educativa donde las herramientas tecnológicas son imprescindibles en todo tipo de actividades que desarrollan.

Pilar Pons avanza que el servicio que se está ofreciendo a los beneficiarios es de "buena calidad" y apostilla que "el Consell está muy satisfecho de como se está ejecutando el proyecto y el resultado del mismo".

Y así lo ratificaba ayer el presidente del Consell, Santiago Tadeo, en la reunión celebrada ante los alcaldes de la Isla. Tadeo aseveraba que "el objetivo del proyecto wimax y también el de fibra óptica es proporcionar al conjunto de la sociedad isleña redes de comunicaciones de carácter público con la finalidad de reducir la brecha digital en Menorca" y añadía que "el Consell busca mejorar la competitividad de las empresas y evitar la discriminación tecnológica de los ciudadanos".

Cabe recordar que el Consell informó a los alcaldes sobre el avance del proyecto de instalación de fibra óptica en Menorca, en concreto sobre la consulta pública que está preparando la institución a través de la que pretende conocer los operadores privados que tienen previsto invertir en Menorca durante los tres próximos años en proyectos de fibra óptica.