El conseller de Medio Ambiente, Fernando Villalonga, presentó ayer la puesta en marcha de las "deixalleries" de Sant Lluís, Ferreries y Es Mercadal, que desde el pasado 12 de diciembre están en funcionamiento con el objetivo de acoger los residuos domésticos de la ciudadanía y las pequeñas empresas.
La puesta en marcha de estas instalaciones representa el inicio del funcionamiento del Servicio Público de gestión de la Xarxa de Deixalleries de Menorca, al cual se irán incorporando el resto de instalaciones de los diferentes municipios de la Isla.
Concretamente, hay siete construidas, ya que la de Es Castell está en fase de proyecto.
Cabe informar que una 'deixalleria' es un centro de recepción, clasificación, y almacenamiento temporal de residuos municipales, debidamente cerrado y vigilado.
Estas instalaciones se ponen al servicio de los ciudadanos, y de las pequeñas actividades de servicios, oficinas y comercios, con el fin de poder aportar los residuos y garantizar su reciclaje, así como reducir el impacto negativo en el medio ambiente.
Así, los vecinos podrán recibir información sobre muchos detalles de la gestión de este tipo de residuos y es que las instalaciones pueden acoger restos con características de peligrosidad, como pueden ser fluorescentes, y luces de vapor de mercurio, baterías, pilas, frigoríficos, electrodomésticos con CFC, y aceites minerales usados de procedencia particular.
Respecto a los residuos no peligrosos, los centros almacenarán equipos eléctricos y electrónicos, residuos de construcción y demolición de obras menores, otros residuos voluminosos, como muebles, colchones, neumáticos, restos de poda, metales, textiles, papel y cartón, vidrio y envases ligeros.
Según el conseller Villalonga, éste es un paso más para acercar y facilitar la gestión de residuos a la ciudadanía, para que todos puedan participar y responsabilizarse de sus propios residuos. "Si gestionamos correctamente estos resto, dejarán de ser una molestia y podrán transformarse en una oportunidad, tanto de trabajo, como de aprovechamiento de recursos o de valorización energética y económica" dijo el conseller.
De las siete empresas presentandas, Triatges Menorca SL fue la elegida para la adjudicación del contrato de gestión del servicio público para la gestión de la Xarxa de Deixalleries de Menorca por un presupuesto anual de 300.725, 43 euros durante un periodo de tres años.
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