Un propietario pide reconstruir la casa que el desvío le expropió

Janer explica que con el primer proyecto de desvío, sus casas no estaban afectadas. Después modificaron los planos, y sí se vio afectada su propiedad y las casas, que empezaron a construirse en el año 1860 y que en total ocupan unos 600 metros cuadrados. "Como ciudadano, tengo que aceptarlo", comenta. Lo que no está dispuesto a acatar, añade, es que le impidan levantar la misma edificación, sin ganar ni un metro, en otro punto de la misma finca.

"La Ley de Carreteras contempla esta posibilidad, pero desde el Consell me aseguraban que no era posible porque Sant Bartomeu se halla dentro de una Área Natural de Especial Interés (ANEI)", comenta.

Ante esta respuesta, Janer sigue batallando con el Consell, quien le contesta que será indemnizado por la pérdida de las casas, aunque la tasación que aporta la institución insular es muy inferior a la que tiene el propietario. El acuerdo tampoco es posible, y Janer insiste en que "lo ideal sería que me pagaran la edificación que me demuelen, y que yo pudiera volver a construir en la misma finca".

Pero aquí de nuevo apareció el Plan Territorial Insular (PTI). Janer asegura que el Consell le argumentó que la normativa territorial no permite a un particular trasladar una construcción en el interior de una ANEI. En cambio, añade, no dice nada sobre si este traslado es obligado por una decisión de la Administración, como sería el caso. En este punto, y ante la imposibilidad de tener una respuesta oficial, Janer entró una instancia en el Ayuntamiento de Ferreries en enero de este año, solicitando que el Consistorio interviniera ante el Consell para hallar una solución.

Ante la falta de respuesta, la instancia volvió a ser presentada hace pocas semanas y el jueves llegó al pleno municipal. Partido Popular y Unió Menorquina apoyaron la petición del propietario, con lo que la propuesta salió adelante con mayoría. PSOE y Entesa se abstuvieron en la votación, alegando que el pleno municipal no puede pronunciarse sobre una cuestión puramente técnica, en la que solamente los expertos del Consell pueden decidir.

Así, el portavoz de la Entesa, Josep Carreres, explica que "moralmente entendemos y vemos con buenos ojos la intención de reconstruir las casas en otro punto, pero entendemos que no se ha seguido el procedimiento adecuado. No queremos que un bien etnológico se pierda, pero nosotros no somos los indicados para tomar esta decisión".

En este sentido, el propietario de la finca asegura no entender la opción de PSOE y Entesa. "Yo solamente quería saber si al Ayuntamiento le parecía adecuado que se volvieron a construir las casas de Sant Bartomeu. Solamente quería el apoyo moral, no que me concedieran una licencia".

De momento, la pelota está en el tejado del Consell. Una institución con la que Janer ya habló en el anterior mandato y con el que también ha intercambiado opiniones con los nuevos mandatarios.

De todos modos, Janer sigue sin conseguir lo que quiere, un documento oficial en la que se manifiesta la postura oficial de la institución. Él cree que su demanda es legítima, puesto que también desde el Consell se descartó indemnizarle con el valor de la finca más el llamado lucro cesante, es decir, lo que deja de ganar por el hecho de que las casas ya no existen.

De hecho, la construcción ya ha sido derruida. Un edificio en el que, explica Janer, tenía depositadas muchas esperanzas. "Quizás me hubiera planteado explotar agrícolamente la finca, pero sin casa es mucho más complicado. ¿Cómo encontraré un payés para la explotación si le digo que no hay casas ni las habrá?", dice el propietario.