El municipio des Castell apagará una farola de cada tres alternativamente. Lo hará siguiendo las recomendaciones de un grupo de expertos que, de manera altruista, han diseñado un proyecto de ahorro energético para la iluminación de las calles.
Para llegar a esta recomendación, los técnicos han valorado aspectos como la seguridad, la frecuencia de paso de los peatones, la estación del año y si se trata de días festivos o no.
El Ayuntamiento de Es Castell ha asegurado que gracias a esta iniciativa pionera se conseguirá "el considerable ahorro energético y económico así como una notable reducción de la contaminación por CO2 y el alargamiento de la vida útil de cada lámpara".
Y han añadido que "se trata de encontrar una forma más sostenible de utilizar nuestros recursos energéticos, no se trata tanto de hacer grandes cambios sino de administrar mejor lo que ya tenemos y concienciar a la población".
El equipo de expertos está integrado por cuatro técnicos: Rafael Muñoz Camos (ingeniero técnico industrial eléctrico); Daniel Barquilla Gago (técnico superior en instalaciones electrotécnicas); Manel Gómez Palliser (ingeniero técnico industrial eléctrico) y Neus Pons Domènech (ingeniera técnica industrial eléctrico).
El municipio de Es Castell es pionero en la utilización de un sistema telemático para coordinar la red de iluminación pública. Además, el sistema actual ya tiene la capacidad para bajar la intensidad de la iluminación, ahorrando un 20 por ciento en el consumo actual.
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