Cuarenta policías nacionales se han incorporado a la plantilla para velar expresamente por el control y la vigilancia del Centro Penitenciario Menorca.
Los efectivos -35 policías nacionales y cinco oficiales- llegaron a la Isla a lo largo del fin de semana como medida de seguridad ante la recién entrada en funcionamiento de la cárcel ubicada en la carretera de Maó-Sant Lluís.
Según informa el director insular de la Administración General del Estado, Javier Tejero, "este aumento de la plantilla se debe expresamente a ofrecer el máximo control y vigilancia de la cárcel".
Aún así, sostiene que los efectivos destinados a este cometido variarán en función de la ocupación de la prisión por lo que en momentos de reducido número de presos la plantilla reforzará la seguridad general de toda la Isla.
A su vez, Tejero afirma que el servicio de vigilancia y protección de la prisión ha sido asignado al Cuerpo Nacional de Policía puesto que las dependencias penitenciarias pertenecen al término municipal de Maó, a pesar del malestar expresado por un sindicato policial.
Cabe recordar que la Unión Federal de Policía (UFP) denunció públicamente esta asignación al cuerpo al considerar que debería ser asumido por el Cuerpo de la Guardia Civil "que dispone de más efectivos y vivienda pública junto a dicha prisión".
El sindicato solicitó que se reconsiderara la decisión por causar un notable malestar en la plantilla por los perjuicios que puede ocasionar dicha medida en las condiciones socio-laborales de los funcionarios y la precaria consolidación de los efectivos de la Policía en Maó.
En los próximos días se completará el traslado de reclusos hasta llegar a unos 60, en principio todos ellos de origen menorquín o afincados en al Isla y que están cumpliendo condena fuera de ella. Los primeros presos procedentes de Palma recalaron a la Isla el pasado jueves día 11.
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