Línea. Ha arrancado de forma provisional pero seguramente se mantendrá - Archivo

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Desde hace una semana aproximadamente, Ciutadella cuenta con una nueva línea de autobús. La noticia no sería destacable si no fuera porque se trata de un servicio que tiene como destino final una playa virgen, la de Son Saura. La iniciativa ha arrancado en modo de prueba durante una temporada, pero desde la empresa que presta el servicio, Autocares Torres, su gerente, Isidro Bellota, avanza que casi con toda seguridad la iniciativa continuará a lo largo de todo el verano.

La empresa aún no posee la documentación pertinente para la prestación del servicio, aunque sí tiene el visto bueno por parte del Consell insular para realizar un periodo de prueba, durante el cuál se perfilarán definitivamente las frecuencias y horarios. De momento hay cuatro salidas por la mañana desde Ciutadella (10.30. 11.30, 12.30, 13.30) y otras tantas por la tarde (16.30, 17.30, 18.30, 19.30). La línea tiene una parada intermedia en el poblado prehistórico de Son Catlar, que data de la Edad de Bronce. El final de trayecto se sitúa en el aparcamiento público de la playa de Son Saura, controlado por los servicios de vigilancia del Consell insular.

Las características del camino rural que conduce hasta la playa obliga a la empresa a emplear un minibús, con una capacidad aproximada de 25 viajeros. No obstante, la estrechez de algunos tramos supone un problema cuando se cruzan vehículos en direcciones opuestas.

Comenta Bellota que Son Saura es por el momento la única playa del municipio que ofrece facilidades para la prestación de un servicio de transporte. Añade el gerente que debido a que están probando el funcionamiento, aún no se han publicitado el servicio. No obstante, parece que muchos de los usuarios que lo han utilizado hasta ahora son de Ciutadella, lo cual demuestra según Bellota que no se trata de una iniciativa pensada únicamente para los turistas, sino también para los residentes.

De esta forma, Ciutadella ofrece un nuevo servicio a sus visitantes para acceder a una playa que habitualmente suele quedar cerrada durante gran parte del verano al superar el límite de coches impuesto. Por otra parte, supone una gran oportunidad de conocer las playas vírgenes del municipio para aquellos visitantes que no pueden costearse vehículos de alquiler. Hay que tener en cuenta que además de las dos playas de Son Saura, hay mucha gente que realiza excursiones hasta la cala próxima de Es Talaier.