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Los ciudadanos andamos preocupados por nuestras deudas con los bancos, y pocas veces nos paramos a pensar que lo que gastan nuestras administraciones también es nuestro dinero, y que su deuda es también nuestra deuda. Si se adopta esta premisa, cada menorquín debe a los bancos 1.185,2 euros en concepto de deuda de las administraciones menorquinas (ayuntamientos y Consell). Así se desprende de los últimos datos publicados por el Ministerio de Economía, que pone de manifiesto también la diferencia entre municipios que se da en el seno de la Isla.

De este modo, los habitantes de Ciutadella son los que cargan con una mayor deuda de sus administraciones. Si se tiene en cuenta únicamente el endeudamiento de su Ayuntamiento, el resultado sería una deuda de 927,7 euros, cantidad a la que habría que sumar los 445 euros que cada menorquín soporta del balance del Consell (a raíz de la deuda de 41.984.000 euros registrada a 1 de enero de 2011). Así, cada ciutadellenc carga a sus espaldas con 1.372,7 euros de deuda pública. En Maó, la deuda es de 1.149 euros por habitante. En el otro extremo se sitúa Ferreries, donde la carga financiera por habitante (sumando Ayuntamiento y Consell) es casi la mitad que en Ciutadella, 717,7 euros.

Esta sería la fotografía fija a 1 de enero de este año. Si es observa la evolución desde el año 2008, se ve como existen comportamientos muy dispares en cada uno de los Consistorios, aunque hay una tónica general: en el último año ha habido un esfuerzo por reducir el endeudamiento en cinco de los ocho municipios. Solamente Ciutadella, Maó y Es Mercadal incrementaron sus números rojos.

ES MERCADAL
Especialmente Es Mercadal aumentó sus números rojos el año pasado, ya que sumó más de un millón de euros a la deuda anterior, o lo que es lo mismo, incrementó su endeudamiento un 44 por ciento en tan solo un año. El caso de Es Mercadal es aún más destacable si se compara la situación de enero de 2009 a la de enero de este año. En dos años, la deuda se ha más que duplicado (un 120 por ciento de incremento). El alcalde en funciones, Francesc Ametller, admite este incremento, pero lo explica por el elevado esfuerzo inversor, sobre todo por parte de administraciones superiores. Además, Ametller destaca que la situación financiera del municipio es buena, y concluye que el endeudamiento ha merecido la pena.

En estos dos años, otro de los municipios que más ha incrementado su deuda ha sido Ferreries (un 50 por ciento), mientras que Ciutadella lo ha hecho un 18,7 por cien y Maó un 10 por ciento. Otros municipios, como Es Castell, Sant Lluís y Es Migjorn Gran han conseguido reducir su deuda con los bancos, especialmente Es Migjorn Gran, que la ha bajado un 18,2 por ciento.

Alaior también es otro caso que merece un comentario a parte. En el último año, el Consistorio consiguió reducir en casi un millón de euros su deuda con los bancos, aunque en el año anterior la había aumentado en 1,2 millones, lo que le supone un aumento en estos dos últimos ejercicios del 3,7 por ciento.

Estas cifras no incluyen las deudas que los Consistorios y el Consell tienen contraída con sus proveedores.