Santiago Tadeo en uno de los despachos de la sede del PP, en la calle Sant Jordi de Maó - Gemma Andreu

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Santiago Tadeo, afiliado al PP desde 1999, el mismo año en que el PSOE ascendía con Joana Barceló al poder en el Consell, ocupará ahora, doce años después, la presidencia de la institución. Sabían los 'populares' que debían gobernar con mayoría suficiente, que los pactos están fuera de su alcance, pero el propio Tadeo reconoció que el 22-M les ofreció una victoria tan holgada como sorpresiva. Ahora toca cumplir, gestionar en el peor momento económico y con una estructura que, insiste, será más reducida. Afable y contenido, como se ha mostrado siempre, incluso en la noche de la victoria electoral, Tadeo explicó ayer cómo afronta su nueva etapa.

Siguiendo las directrices del partido en Balears, finalmente se auditarán las cuentas del Consell. ¿Se harán públicos los resultados?
Habrá que decir cómo están las cosas, pero tengo claro que no hay que hacer victimismo. La auditoría no era una prioridad, lo prioritario es dar soluciones a los ciudadanos, pero lo que acordamos, debido a la situación de las instituciones, es hacer una auditoría interna.

Pero esto lo tiene que hacer cualquiera que entra a gestionar una Administración, para ver cómo están las cosas, los pagos a proveedores o a otras administraciones, para ver cuál es el punto de partida. Sabemos que la situación va a ser complicada, tendremos que gestionar con pocos recursos, siguen viniendo tiempos difíciles. También se hará un análisis por departamentos para ver qué gastos superfluos se pueden eliminar.

Se ha hablado mucho de la reestructuración a la baja del organigrama. ¿Hay un plazo para ver si permite un gobierno eficaz?
No, aunque el número de doce direcciones insulares lo dejo ya como fijo, es improbable que se incremente, no tengo ninguna intención.

¿Recurrirá a la designación de consellers no electos?
Esto es posible, pero será en función de cómo veamos las cosas, el Consell tiene que ser gobernable. Puede que se tome la decisión, y sea rápida, o que no se tome.

Ya suenan los nombres de Antònia Gener y Juana Francis Pons Vila, ¿qué opina?
Las dos son personas muy válidas, pero desde el momento en que no es seguro que la plaza se vaya a cubrir, pues no tiene nombre y apellidos.

La crisis ha tenido su efecto en los resultados electorales. ¿Qué puede hacer una institución como el Consell para ayudar a la recuperación económica?
Desde que soy presidente del PP he dicho que, al margen de la crisis financiera internacional, Menorca tenía una segunda crisis estructural, y sigo creyendo en ello. Una crisis determinada porque los anteriores gobernantes hablaban de las potencialidades de Menorca, pero nunca las desarrollaban.

Este es el inicio de temporada con mayor número de parados, casi 7.000, y somos la isla donde la ciudadanía tiene peores perspectivas de futuro. Hay cosas que se han hecho mal, y a partir de ahora hay que hacerlas bien, como dar facilidades a los empresarios.

¿Alguna iniciativa concreta?
En la Conselleria de Movilidad, Transporte y Proyectos habrá un dirección insular para que se puedan desarrollar proyectos buenos para Menorca y que a los empresarios se les den las máximas facilidades, que no vuelvan a pasar cosas como las de Torralbenc Vell, o que no nos venga gente diciendo que han sido incapaces de desarrollar proyectos porque desde el Consell tenía un 'no' permanente. Queremos cambiar ese 'no' por un 'sí'. Yo creo que hay un margen para combatir la crisis. Por eso en esa Conselleria habrá una dirección insular para grandes proyectos, que atenderá a los empresarios. La Administración está mal, tiene que dar protagonismo a la sociedad civil y al sector privado para crear riqueza. En una crisis de larga duración como esta las administraciones no pueden seguir actuando con endeudamiento, porque en eso ya han llegado al límite.

¿Qué cambios se introducirán en el Plan Territorial Insular (PTI)?
Abogamos por su modernización y será de las primeras cosas que hagamos. Se modificará en cinco temas concretos y los técnicos dirán cómo se tiene que hacer. En suelo rústico lo que buscamos es que cuando una finca deja la actividad agrícola, no se venga abajo, que las casas de 'lloc' no se caigan, no puede ser que no se deje ni cambiar una ventana, estas cosas reactivan la economía, dan trabajo. En cuanto al turismo, está claro que tenemos una planta que en algunos aspectos es obsoleta, hay que dar facilidades para que vuelva a entrar en el mercado, con la fórmula del condohotel u otras. Hay que dar una solución a los 'hortals', y en cuanto a las densidades urbanas, el PTI se aprobó en un momento de crecimiento diferente, pero ahora vemos que se está provocando un incremento del precio de la vivienda y más ocupación de territorio. Habrá que retocar eso en las zonas de crecimiento de los municipios. Después está el tema de la subjetividad.

Lea la entrevista completa en la edición impresa del diario "Menorca" o puede descargarse el pdf (pulse aquí )